El gobierno de Donald Trump ha dejado hasta el momento a 711 menores bajo su custodia, pese a que un juez fijó este jueves como día límite para la reunificación de más de 2.500 niños separados de sus padres inmigrantes indocumentados en la frontera con México, bajo la política antiinmigración de tolerancia cero.

Así, el Departamento de Justicia estadounidense informó a la corte que lleva el caso de que hasta la fecha solo han podido devolver a 1.442 niños y adolescentes a sus padres en centros de detención para inmigrantes; otros 378 han sido puestos en libertad y entregados a padres que ya no estaban detenidos o a otros familiares.

La Casa Blanca sostiene que 711 menores no han sido devueltos por ahora a sus padres, porque estos no cumplen con los requisitos para una entrega segura, por diversos motivos, entre ellos, que los vínculos filiales no se han podido comprobar, que los padres tienen antecedentes criminales o una enfermedad infecciosa, que no pudieron ser localizados o que fueron deportados tras ser separados de sus hijos, como es el caso de al menos 431 padres. La mayoría de los inmigrantes en esta situación proceden de Guatemala, El Salvador y Honduras.

A esto se suma que muchas de las familias ya reagrupadas también afrontan un futuro muy incierto, porque el gobierno de Trump presiona para deportar sin el debido proceso muchos de los padres inmigrantes. 

El juez Dana Sabraw ordenó el 16 de julio pasado que se suspenda temporalmente la separación de las familias reunificadas, para que evitar que se siga vulnerando el derecho de asilo que garantizan las leyes en EEUU, y su orden sigue vigente, pero el Gobierno republicano insistió esta semana en que revierta su decisión para poder proceder "inmediatamente" con las deportaciones.

Al respecto, la Unión Americana por las Libertades Civiles (ACLU) reaccionó de inmediato y pidiendo al juez que confirme la suspensión, que estipula que las órdenes de expulsión no se pueden ejecutar hasta al menos siete días después que las familias vuelvan a estar juntas. Además, pidió que los padres tengan una semana para decidir si quieren solicitar asilo, si prefieren que lo hagan solo sus hijos y qué consecuencias implicaría alguna de estas decisiones.

El juez consideró razonable la petición y solicitó al Gobierno que responda en una semana a las preocupaciones en mención y anunció que, tras ese plazo, tomará una decisión definitiva sobre este asunto.

DATO

✔ Acorralado por una ola internacional de indignación y repudio, Donald Trump tuvo que derogar el 20 de junio su política para la separación de familias en la frontera, con el fin de menguar una crisis que él mismo provocó. Y a los seis días de haber dado marcha atrás, la primera en su presidencia, el juez Dana Sabraw lo obligó a reunificar a los inmigrantes bajo un estricto plazo, que ya se cumplió este 26.

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