La tormenta política que se preveía en EEUU luego de que el mandatario Donald Trump desacreditara ante el mundo a sus servicios de inteligencia, al respaldar en la cumbre de Helsinki la postura de su par ruso Vladímir Putin, quien negó una vez más la injerencia del Kremlin en las elecciones del 2016 que llevaron al republicano a la Casa Blanca, ya está ocurriendo.
"El presidente Putin dice que no es Rusia. No veo ningún motivo por la que debería ser así", dijo Trump en la conferencia conjunta que ofreció con su par ruso tras la cumbre. Insistió además en que "no hubo colusión alguna" entre su equipo de campaña y el Kremlin.
En este caso, la postura de Putin, quien reconoció que quería que Trump gane las elecciones en EEUU, coincide con los intereses particulares del magnate, quien es investigado por esta trama y podría incluso ser acusado por obstruir la acción de la justicia.
En este contexto, el director de la CIA, Daniel R. Coats, criticó el comentario de Trump. "Hemos sido claros en nuestras valoraciones de la injerencia rusa en las elecciones de 2016 y sus intentos generalizados de socavar nuestra democracia", advirtió. Coats además difundió un comunicado en el que dice que la comunidad de inteligencia de EEUU respalda las "evaluaciones basadas en hechos" respecto a la intromisión rusa en las elecciones de 2016.
Por su lado, John Brennan, director de la CIA entre 2013 y 2017, estalló en Twitter y acusó al presidente de traición.
"La actuación de Donald Trump en la rueda de prensa de Helsinki excede los delitos graves y faltas. No ha sido menos que traición. No solo los comentarios de Trump fueron estúpidos, sino que está completamente en el bolsillo de Putin. Patriotas republicanos, ¿dónde están?".
Y los republicanos recogieron el guante y expresaron su estupor por la actitud de Trump en Helsinki, pese a los esfuerzos de Trump, a través de Twitter, para calmar los ánimos de sus funcionarios.
Como dije hoy y muchas veces antes, "tengo GRAN confianza en MI gente de inteligencia". Sin embargo, también reconozco que para construir un futuro mejor, no podemos centrarnos exclusivamente en el pasado. Como las dos potencias nucleares más grandes del mundo, ¡debemos llevarnos bien! # HELSINKI2018.
Pero el daño ya estaba hecho. Y uno de los primeros en cuestionarlo fue el senador de Arizona Jeff Flake, un crítico habitual del presidente.
"Nunca creí que vería a un presidente estadounidense subirse a una tarima con el presidente ruso y echar la culpa a EEUU de una agresión rusa".
El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, subrayó que a estas alturas que "no hay duda de que Rusia interfirió en las elecciones de 2016" y que por tanto no "hay una equivalencia moral entre EEUU y Rusia".
A su turno, el senador John McCain tildó la actuación de Trump como una "de las más vergonzosas en la historia" de un presidente de EEUU.
"El daño infligido por el egoísmo e ingenuidad de los autócratas de Trump es difícil de calcular. Pero está claro que la cumbre de Helsinki ha sido un trágico error".
El senador Lindsey Graham sostuvo que Rusia vería la reacción de Trump como un acto de debilidad y más sorprendentes aún son las críticas de los periodistas de la cadena conservadora Fox, la favorita del magnate republicano. El presentador Neil Cavuto dijo que la actitud de Trump es "asquerosa"; su colega Abby Huntsman por su lado señaló que "ninguna negociación hace que valga la pena lanzar a tu gente bajo las ruedas de un autobús".
La semana pasada, el Departamento de Justicia de EEUU anunció una acusación formal contra 12 agentes de inteligencia rusos por robar y divulgar documentos del equipo de campaña de Hillary Clinton en los comicios de noviembre del 2016, tras lo cual, el señador McCain le exigió a Trump —en vano— que se mostrara firme en la cumbre de este lunes y exigiera responsabilidades a Putin.
"Putin no es un amigo de EE UU, ni siquiera un mero competidor. Putin es enemigo de EEUU, no porque nosotros lo deseemos, sino porque él ha elegido serlo. Él escogió invadir Ucrania y anexionar Crimea. Escogió ayudar a [el presidente Bachar] El Asad a masacrar a los sirios. Escogió atacar nuestras elecciones y menoscabar democracias en todo el mundo".
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