La corrupción policial está tan enquistada en la institución, que el problema nace en las escuelas de formación, por lo que el Ministerio del Interior se prepara para cerrar algunos de los 27 centros de estudios de oficiales y subfoficiales en el país ante la infiltración de delincuentes en sus aulas.
Así lo indicó el director general de la Policía, Richard Zubiate, al señalar que el objetivo es reducir el número de escuelas actuales, que albergan a unos 13.800 alumnos, hasta dejarles en 10 o 12. "Todavía estamos estudiando qué escuelas pueden desaparecer. Las de Piura y Chiclayo no están muy buenas. La de Trujillo sí", adelantó el oficial citado por La República.
A su turno, el ministro del Interior, Mauro Medina, precisó que todos los aspirantes a ser policías a quienes les hallaron antecedentes penales ya fueron apartados de las escuelas, mientras que actualmente hay un caso en investigación.
"Algunos tenían requisitorias por parte de la Justicia, pero hábilmente habían presentado documentos falsos o de alguna forma habían logrado esconder su pasado", dijo este viernes en RPP Medina, quien también fue director general de la Policía.
Otra de las razones para reducir el número de escuelas policiales es homogeneizar los criterios educativos y mejorar su calidad, en un contexto en el que la mayoría de las bandas criminales desarticuladas por las autoridades tienen miembros que están o pasaron por la Policía entre sus cabecillas, como 'Los Babys de Oquendo', 'Los Rucos', 'Los Norteños y Guarayos', 'Los Mellizos de Cajamarca' y 'Las Mamis de Ceres'.
El caso más clamoroso de este tipo es el de 'Los Babys de Oquendo', organización dedicada a la extorsión y sicariato que fue desarticulada en junio del 2017. De los 61 detenidos, 24 eran policías en actividad.
En 'Los Norteños y Guarayos', banda que secuestraba, atracaba y traficaba armas, habían cuatro policías en sus filas: tres de ellos —un mayor y dos suboficiales— estarían vinculados al asalto de un camión de Prosegur en 2013, en Amazonas.
La organización 'Las Mamis de Ceres', que desde el 2015 se dedicada a la trata de personas, era liderada por el suboficial Víctor Mauricio Infante y su esposa, Irias Marcelo Lloclla, hasta que fue desbaratada en junio del 2017.
Lee también:
Así operaban los 24 policías corruptos que integraban organización criminal "Los babys de Oquendo"
Director de Seguridad del INPE integraría banda criminal "Los babys de Oquendo"
