¿Cómo podemos conocer lo que el inconsciente guarda? "A través del lenguaje no verbal, por ejemplo, nuestro cuerpo habla y comunica constantemente y si lo observamos, podremos leerlo y conocer las verdades no dichas e incluso desconocidas para el interlocutor", dice a LaMula la publicista argentina Marisol Agüero, afincada en Lima desde 2015. 

No solo es publicista, tiene más de diez años de experiencia en el desarrollo de campañas de marketing y comunicación en agencias de publicidad y multinacionales, y formación en el área de estrategia y planificación, desarrollo de concepto creativo, implementación de metodologías ágiles enfocadas en el usuario y creación de contenido para redes sociales. Además, es consultora en programación neurolingüística.

De hecho, cada parte del inconsciente configura y define nuestro accionar en las elecciones que realizamos. ¿Sabemos en qué medida? "La neurociencia, que combina la biología con la psicología conductual y cognitiva, demuestra que el 95% de nuestra actividad mental es inconsciente o automática, mientras que solo el 5% es consciente, racional, lógica y analítica. Por esto, nuestra propuesta se dirige explorar formas de conocer y reentender las potencialidades del inconsciente, porque sobre él recaen las decisiones que realizaremos a la hora de efectuar una compra, o, digámoslo más ampliamente, una decisión", explica.

Marisol va a dictar un taller de programación neurolingüística y neuroventas (¿Cómo venderle al inconsciente?). "Este taller no espera responder de una sola forma nuestra pregunta, sino que espera acercarnos aproximaciones múltiples, y herramientas igualmente variadas. Enfatizando, sobre todo, en dos herramientas teóricas: la programación neurolingüística y las neuroventas. Partimos además, de que el inconsciente, como concepto, es un terreno que necesita más de cuatro semanas para intentar ser explorado. Por ello, primariamente podríamos definirlo como lo que olvidamos, lo que reprimimos, lo que no tenemos en cuenta y que sin embargo, transportamos en nuestros genes", añade.

Marisol ofrece que quien lleve el taller aprenderá conceptos que le permitirán decodificar las verdaderas necesidades y deseos de las personas, leyendo lo que el cuerpo dice y la palabra calla, alcanzando una comprensión más profunda de cuál es el detonante que empuja al consumidor. 

"Proponemos entonces, explorar nuestras contradicciones, nuestra subjetividad, nuestra psiquis para poder entender no solo la experiencia de compra, sino los afectos que comprometemos en los productos u ofertas que realizamos. De esta forma, aportamos a un cambio de paradigma ético, o al menos a su discusión, es decir, a generar otra forma de relacionarnos como productores, vendedores y consumidores de productos y servicios, en las que no solo vamos a comprar/vender con un interés material, sino que para trascenderlo y saltar a una discusión ética del valor del consumo, es posible plantear el valor de un producto no desde el producto per se, sino desde la experiencia y la emoción que sujetan a este".


El curso se dictará los días 15, 22, 29 de marzo y 5 de abril. Aquí más información. 

 

(Fotos: Eduardo Amat y León)