Este martes 30 de enero el presidente estadounidense Donald Trump pronunciará su primer discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso de ese país. De acuerdo con analistas políticos de Estados Unidos, lo más probable es que parte de él sea sobre las negociaciones entre demócratas y republicanos en torno al cierre de gobierno. Proyectan que Trump culpará de la demora en el acuerdo al Partido Demócrata y su defensa de los inmigrantes en detrimento de los militares y de la sociedad estadounidense en general. 

Por su parte, el magnate ha subrayado que la inmigración y el comercio serán temas destacados de su discurso, además de la salud económica y su plan sobre infraestructura. “Hemos trabajado muy duro en él. Es un gran discurso, un discurso importante“, dijo este lunes a los periodistas. 

El Estado de la Unión es un evento anual importante y mediático. Consiste en un informe que da el Presidente al Congreso sobre el estado del país. El discurso es también usado para que presente sus propuestas legislativas para el año. Siempre ha sido presentado en enero de cada año, y sólo en seis ocasiones se dio en febrero.

Inmigración 

Trump ha propuesto la semana pasada al Congreso una reforma que permitiría acceder a la ciudadanía a 1,8 millones de indocumentados que llegaron a Estados Unidos de niños, a cambio de US$25.000 millones para construir el muro que lo separe de México y reforzar la seguridad fronteriza.

La cifra de 1,8 millones de inmigrantes es superior a los 690.000 jóvenes, conocidos como “dreamers”, que están protegidos de la deportación por el programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), cuya vigencia expira en marzo por orden de Trump.

Economía

El mandatario también ha asegurado que su discurso tendrá un contenido “muy importante sobre comercio”, y que en él abogará por un intercambio “más recíproco”, con más beneficios para las exportaciones estadounidenses.

En en línea con su discurso proteccionista, Trump ha abandonado las negociaciones relacionadas con el acuerdo transpacífico (el TTP) y ha empezado a revisar el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte). Sin embargo, no ha hecho más avances en esta dirección y Estados Unidos todavía atrae más inversión extranjera que todos los BRICS juntos.

Se espera que el principal anuncio del discurso esté relacionado con su plan para las infraestructuras del país, aunque no está claro hasta qué punto dará detalles sobre una propuesta que, según el presidente, requerirá probablemente una inversión total de US$1,7 billones durante diez años.

Lo que puede darse por sentado es que Trump presumirá de la buena salud de la economía estadounidense: un crecimiento acelerado al 3% anual, récords históricos en la bolsa, una tasa de desempleo en el 4,1% y la mayor reforma fiscal del país en varias décadas con notables recortes de impuestos para las empresas.

En el plano internacional, Trump destacará sus esfuerzos para potenciar las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y mencionará la amenaza que suponen las acciones de Corea de Norte, según la Casa Blanca.

Cabe indicar que el presidente estadounidense cuenta con los peores índices de popularidad de la historia, por debajo del 40%, según los últimos índices publicados. Una cifra inédita para el primer año de un mandatario en ese país. Sin embargo, esto poco parece importar a su electorado de base. 


(Foto: CNN)