El Tribunal de Apelaciones de la FIFA le redujo la suspensión de un año a seis meses a Paolo Guerrero, por el resultado analítico adverso en el test antidoping al que se sometió tras el partido por las eliminatorias ante la selección Argentina, con lo que quedó habilitado, en principio, para estar en Rusia 2018.
Pedro Fida, abogado del capitán de la selección nacional, confirmó lo que había adelantado Globosporte, y precisó que la sanción expirará en mayo, porque rige desde que se conoció la suspensión temporal de Paolo, el 3 de noviembre pasado, pero anunció que buscarán la absolución total ante el TAS, como ya lo habían decidido.
Este escenario es el ideal, porque implicaría que Guerrero vuelva a la alta competencia de inmediato, lo que le permitiría llegar a Rusia en óptimas condiciones.
"Tras analizar todas las circunstancias específicas del caso, en particular el grado de culpabilidad del jugador, la Comisión de Apelación de la FIFA consideró que un periodo de inelegibilidad de seis meses es una sanción proporcionada", dijo la FIFA en una nota publicada en su sitio oficial.
"El periodo de vigencia de la suspensión comienza el 3 de noviembre de 2017, fecha en la que el jugador fue suspendido de manera provisional por el presidente de la Comisión Disciplinaria de la FIFA. De conformidad con el art. 29 del Reglamento Antidopaje de la FIFA, la suspensión incluye, entre otros, todo tipo de partidos en el ámbito nacional e internacional, amistosos u oficiales. La parte dispositiva de la decisión de la Comisión de Apelación de la FIFA se ha notificado hoy".
La decisión del Tribunal de Apelaciones de la FIFA marca un precedente porque en esta instancia se suelen ratificar los fallos de primera instancia, y la situación de Paolo parecía complicada, pero en este caso no solo hubo una reducción, lo que parece darle la razón a la defensa del delantero, sino que lo hizo en el último día de sus labores del año del ente rector del fútbol mundial.
La defensa de Guerrero se reforzó además con el abogado español Juan de Dios Crespo, que defendió a Messi de la suspensión durante las últimas eliminatorias, quien se sumó a Bichara Neto y Marcos Motta, quienes lo defendieron desde el inicio en el proceso de dopaje que le abrió la FIFA.
Así, los abogados de Paolo irán al TAS para intentar anular la sanción casi con los mismos argumentos del primer juicio, en el que lograron demostrar que Guerrero no consumió cocaína, y que la sustancia hallada en su orina, la benzoilecgonina, llegó ahí de manera involuntaria.
"Recordamos la jurisprudencia anterior en el CAS de casos de absolución, como del tenista Richard Gasquet y, por eso, ahora vamos a intentar la anulación completa de la pena", afirmó Bichara.
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