La investigación preliminar contra la exalcaldesa de Lima Susana Villarán por el presunto delito de lavado de activos, tras revelarse un posible aporte de US$ 3 millones de la empresas Odebrecht y OAS a la campaña del No a la revocatoria, ha generado diversos comentarios sobre la manera en que la exburgomaestre debe hacer frente a estas imputaciones que la vinculan a la corrupción de empresas brasileña.

Para Gustavo Guerra García, quien fue presidente de Protransporte en la gestión de la exalcaldesa de Lima, la situación de Villarán es dolorosa para la izquierda en el Perú, debido a que los aportes y sobornos que realizó Odebrecht en el país afectan en gran medida a los sectores políticos del país, entre ellos, la izquierda. A pesar de ello, cree necesario que tanto la exalcaldesa como sus funcionarios más cercanos deben decir todo lo que saben para conocer toda la verdad y que así "caigan todos los que tengan que caer".

En esa línea, fue enfático en señalar que la declaraciones del exdirector de Odebrecht, Jorge Barata, y del publicista Valdemir Garreta, son positivas para el Perú, porque estos testimonios revelados esta semana permitirán conocer el accionar del "club de las constructoras brasileñas" y de su vinculación con políticos peruanos.

“Lo que está ocurriendo es bueno para el Perú, por más doloroso que sea (…). Aunque nos duela a todos y afecte a todos los sectores políticos, incluyendo a la izquierda por el caso de Susana Villarán, esto ha permitido que sepamos una gran parte de la verdad”, sostuvo en RPP.

Otro punto importante que mencionó Guerra García es que este tipo de revelaciones y testimonios, tanto en Perú como en Brasil, hará posible "purgar el sistema político" y evitar en el futuro que las empresas brasileñas involucradas en actos de corrupción vuelvan a contratar con el Estado. "Las investigaciones en Brasil nos permiten saber hoy todo lo que sabemos (…). Con ello tendremos un futuro con más esperanza y menos sometido a la corrupción", anotó el exdirectivo de Protransporte.

Para lograr este objetivo, el exfuncionario cree que es necesario garantizar la continuidad de la información que llega de Brasil y para ello es clave que se evite la destitución del fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, a quien el fujimorismo acusó constitucionalmente en el Congreso y cuyo futuro en el cargo se resolverá dentro poco menos de 15 días, porque de lo contrario las pesquisas sufrirían un duro revés.

“Si no se hubieran dado esos procesos de investigación a fondo en Brasil, quizás no sabríamos hoy día todo lo que sabemos. Con la información que viene de Alan García, Keiko Fujimori,Susana Villarán, todo esto ahora se sabe”, afirmó. 

(Foto de cabecera: Andina)

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