"Actualmente hay una inquietud por el artículo 6 de la Ley de la Cinematografía y el Audiovisual Peruano", dijo a LaMula.pe el crítico de cine Emilio Bustamante, quien junto a su colega Jaime Luna Victoria, ha publicado Las miradas múltiples. El cine regional peruano (Fondo Editorial de la Universidad de Lima, 2017), una interesante indagación sobre un cine que muchos peruanos no tiene en el radar debido principalmente a las dificultades de distribución que afrontan. 

"Los que los cineastas regionales temen es que ese 30% no vaya a ellos que viven y trabajan en las regiones, sino a cineastas limeños, y hasta extranjeros, que pueden ejecutar proyectos en las regiones, que no es lo mismo", agregó el especialista. 

Ese 30% al se refiere Bustamante son parte de los recursos que el Proyecto de Ley N°1850 (Ley de la Cinematografía y el Audiovisual Peruano) -presentado por el Ejecutivo- otorga al Plan de Fomento de la Cinematografía y el Audiovisual. El referido artículo dice así:

"El Plan asigna no menos del treinta por ciento (30%) del total de los recursos programados para cada año, para incentivar la actividad cinematográfica y audiovisual en las regiones del país, de forma descentralizada". 

El temor de que los recursos se concentren en pocas manos se explica- de acuerdo con Bustamante- a raíz de que en los últimos años cineastas que no residen en las regiones postulan a los premios cinematográficos destinados exclusivamente a estas. 

"Con el transcurrir del tiempo se están presentando, cineastas que viven en Lima, incluso empresas que se crean ad hoc en regiones para participar en los concursos. Algunos pasan al pitching e incluso ganan", dice el crítico sobre esta situación, uno de los temas que aborda con Luna en Las miradas múltiples. "Ese artículo no dice específicamente, que ese 30% va a cineastas que trabajan en las regiones o a empresas que tengan residencia en la regiones", agregó. 

La mirada desde Lima

Un punto medular de la investigación de Bustamante y Luna es el recojo de las opiniones que tienen los cineastas regionales sobre las asesorías y talleres que primero brindó el Conacine primero y luego el Ministerio de Cultura, a través de la Dirección del Audiovisual, la Fonografía y los Nuevos Medios (DAFO). 

Si bien es cierto que para algunos fue positivo porque - a través de estas actividades- pudieron conocer a sus colegas y dialogar con ellos, así como exponer las dificultades que enfrentan para desarrollar sus proyectos; otros consideraron que quienes los impartían no tomaban en cuenta las carencias técnicas o de producción con las que tienen que lidiar. Un situación que es muy distinta a la que se vive en Lima. 

En declaraciones a LaMula.pe, Bustamente recalcó que no es cierto que los realizadores que están fueran de Lima no quieran profesionalizarse. Lo que sucede -enfatizó- es que su proceso de desarrollo es distinto al de la capital del país. 

"El problema parte de que el Estado y particularmente DAFO, no entienden que pueden existir varias formas de hacer cine. Varias formas de producción y narrativas. Y que no necesariamente para profesionalizar al cineasta regional hay que adecuarlo a las formas de producción y a los estilos narrativos y estilísticos del cine estandar comercial, ni siquiera al cine de autor. Justamente, la riqueza del cine peruano reside en estas diversas formas de producción", reflexionó. 

Un ejemplo de la diversidad mencionada -añade- es Wiñaypacha de Oscar Catacora, que combinó las exigencias del Ministerio de Cultura con particularidades propias de la región donde fue producida: Puno. Uno de estos elementos es la producción familiar. "Al final de los créditos aparecen muchos Catacora". Y agrega: "Inclusive la directora de arte fue la mamá de director. Este nos contó que si hubiera contratado a una profesional de Lima, no hubiera logrado el resultado visual final".  Habría que añadir que este largometraje fue alabado por la crítica y premiado en la reciente edición del Festival de Cine de Lima.  

Para tener en cuenta

► Desde 1996 hasta el 2015, Bustamante y Luna contabilizaron 146 películas regionales de más de 75 minutos. De ellas solo 12 doce han llegado a los multicines. 

[Foto de portada: Equipo de Wiñaypacha en pleno trabajo/imagen de la producción de la película]

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