El exsecretario personal de Alan García, Luis Nava Guibert, y el exfuncionario de Petroperú, Miguel Atala Herrera —quien recibió 900 mil dólares de Odebrecht en 2007, a través de la empresa fantasma Klienfeld Services—, no solo coinciden en su amistad con el exlíder aprista, sino que su vínculo con la constructora brasileña se ha vuelto cada vez más evidente.

La empresa Transportes Don Reyna, propiedad de Luis Nava hasta el 2006, cuando el Apra llegó al poder y él se convirtió en un funcionario del gobierno. Ese año se la transfirió a su hijo mayor, José Nava Mendiola, y desde entonces empezó a crecer de forma exponencial, gracias a los contratos de servicios con Odebrecht que ganó durante la última gestión de García, reveló un reportaje de Cuarto Poder.

“(Como secretario del presidente García), Nava despacha con importantes empresarios (...) empresarios que por algún motivo buscaban reunirse con el presidente en funciones (García). Uno de esos empresarios fue Jorge Barata, cabeza de la empresa Odebrecht en Perú, hoy sometido a la justicia brasileña por el caso Lava Jato”, informó el periodista Daniel Yovera en su reportaje dominical.

“A partir del 2007, Odebrecht consiguió obtener la buena pro para obras importantes y para ello contaba obviamente con empresas peruanas de distinto tamaño para operaciones como remoción de tierra y transporte. Una de ellas fue la que Nava padre había fundado y entonces su hijo José Nava Mendiola dirigía: Transportes Don Reyna”, añadió.

De acuerdo al informe periodístico, las licitaciones que Odebrecht ganaba durante el segundo gobierno aprista coincidían con los contratos de Transportes Don Reyna con la constructora brasileña. 

“Desde 2007, fue de franco crecimiento gracias a los contratos que Transportes Don Reyna firmó para que sus camiones presten servicio en la construcción de la Carretera Interoceánica y después en otras megaobras a cargo de Odebrecht. Desde 2007 hasta la fecha, la empresa de Nava ha constituido una flota que hoy supera el medio centenar de camiones”, dice el reportaje.

“Cinco camiones que compró Transportes Don Reyna fueron despachados desde Río de Janeiro por la misma constructora Odebrecht para el consorcio que conformaba con Graña y Montero, ICCGSA y JJC Contratistas para la construcción de los tramos 2 y 3 de la carretera Interoceánica Sur”, reportó “Cuarto Poder”.

El 2007, el mismo año que Miguel Atala recibió 900 mil dólares de Odebrecht, la empresa de transportes de Luis Nava empezó a obtener contratos con la empresa brasileña mientras esta obtenía la buena pro de megaproyectos como los tramos 2 y 3 de la carretera Interoceánica Sur. Tomando en cuenta estos indicios fue que el Ministerio Público decidió iniciar una investigación por presunto lavado de activos contra García y 30 personas de su entorno, entre ellos Luis Nava y Miguel Atala.

(Foto de cabecea: La República)

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