Parecía que iba a pedir perdón como lo hizo el lunes último su correligionaria Yesenia Ponce, pero no, Kenji Fujimori pidió otro tipo de disculpas. 

"Quiero pedir perdón al pueblo peruano por hacerle perder el tiempo por todas estas mezquindades respecto a la posible expulsión de mi partido Fuerza Popular". Así se expresó el congresista en breve reunión con la prensa ante el inevitable proceso disciplinario al que será sometido al interior de su partido.

"Mi lucha -lo digo como hijo- es lograr la libertad de mi padre. Luchar por la libertad de conciencia en el voto y por la defensa de las voluntades. En el fondo, lo que hay detrás de esta posible expulsión de mi partido es que hay gente que no quiere ver al ingeniero Alberto Fujimori libre", señaló.

Como se sabe, el parlamentario ya había sido suspendido anteriormente durante 60 días. Y tras su acción en el Pleno del Congreso la semana pasada y su presencia en Palacio de Gobierno el pasado domingo durante la presentación del nuevo gabinete ministerial, más de un congresista de Fuerza Popular ha sugerido su expulsión del partido pues para esa bancada en lugar de reflexionar, ha persistido en una actitud confrontacional "no solamente contra la bancada sino contra el mismo Congreso". 

El hijo del exmandatario Fujimori afirmó que se someterá a todas las instancias disciplinarias de Fuerza Popular. "No se me ha pasado por la cabeza renunciar a mi partido, he recolectado 800 mil firmas para constituir Fuerza 2011 y luego Fuerza Popular", añadió.  

"¡Basta ya de este maltrato sistemático, basta ya de trabajar al miedo", finalizó sin dar declaraciones a la prensa.


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