Luego de que se revelara que una comisión especial formada por la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA), para investigar el título de contador de Edgar Alarcón, determinó que el titular de la Contraloría obtuvo su grado académico de forma "fraudulenta", este cuestionado funcionario viajó de forma sorpresiva a Arequipa, donde se reunió con la máxima autoridad de este casa de estudios.
Previamente, Alarcón envió a sus emisarios para concertar una cita con el rector la UNSA, Rohel Sánchez, quien lo recibió al mediodía del viernes. Luego el contralor amenazó con demandar a la universidad si es que el Consejo Universitario decidía retirarle el título universitario —lo que implicaría su destitución de la Contraloría—. Esta semana que viene se reunirá para evaluar el informa de al comisión y tomar una determinación al respecto.
Alarcón Tejada también amenazó con querellar a Javier Lizárraga, quien presidió la comisión referida y es el decano de la Facultad de Derecho de la UNSA. "Que haga mil amenazas y denuncias. No tengo temor, porque tengo la verdad de mi lado y los documentos, que están custodiados en la universidad. Ese es mi respaldo: verdad y ley", dijo el catedrático en diálogo con La República.
Lizárraga defendió el informe y la investigación que hizo la comisión que presidió y que integraron otros dos decanos de carreras de la UNSA, respecto a dos temas: el primero, el grado académico de bachiller y, en otro, el título profesional de Alarcón, a raíz de las denuncias que se venían publicando sobre un plagio del trabajo —no fue una tesis— con el que obtuvo su grado académico, pero explicó que este punto no se incluyó en el informe porque no ya no fue necesario, porque comprobaron que no se cumplieron los prerrequisitos (documentar tres años de experiencia laboral).
"Espero que (Alarcón) viaje con su dinero y también todo el séquito que trajo. Ojalá que no les pague la Contraloría con nuestro dinero. Espero que él se defienda con su peculio como ciudadano común y corriente".
El decano descartó que las conclusiones de la investigación sean una "opinión personal", como alegó Alarcón el viernes, durante su visita a la UNSA. "Qué ignorancia. Un informe de una comisión oficial es un instrumento público y es oficial. Es parte del insumo necesario para que el Consejo Universitario adopte una decisión", replicó Lizárraga.
Alarcón también dijo que Lizárraga no debió integrar la comisión porque está incluido en informes de la Contraloría, que lo implicó como exconsejero regional y decano, en irregularidades por más de S/ 15 millones.
"La Ley Orgánica de Gobiernos Regionales y la Ley Universitaria no nos permite el manejo económico a los consejeros y decanos. Yo no manejo dinero, nunca lo hice. A mí no me puede imputar de un solo sol. A mí me han hecho denuncias y han sido archivadas tres veces. Hace más de siete años dejé el gobierno regional y si este señor remueve situaciones no me importa. Busca desprestigiarme", refirió el ahora decano de la Facultad de Derecho de la UNSA, quien acusó a Alarcón de usar a la Contraloría como un instrumento contra quienes lo denuncian. "No me intimida, mis actos son limpios y transparentes", insistió.
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