Genaro Delgado Parker ha sido en los últimos días elevado casi casi a la categoría de 'leyenda' tras su muerte el último fin de semana a los 87 años. Las notas informativas e infinidad de columnas que daban cuenta del deceso resaltaban el haber sido el 'pionero' de la televisión en el Perú o el 'zar de las comunicaciones', sin recordar en mayúsculas su fama de autoritario, mal pagador y su paso por el SIN de Vladimiro Montesinos durante el régimen fujimorista.

Pero felizmente aún queda César Hildebrandt. Nadie mejor que él para recordar esas 'cualidades' del broadcaster que han pasado desapercibidas durante estos días de 'homenaje', teniendo en cuenta que fueron estas las que llevaron al periodista a protagonizar a finales de los noventa la renuncia más 'épica' de nuestra historia televisiva.

En su columna de este viernes en Hildebrandt en sus Trece, recuerda cómo es que inició su relación con Delgado Parker en la primera mitad de la década de los ochenta cuando le propuso hacer Conexiones, un programa que tuvo buena acogida pero que llegó a su fin poco después cuando "nos metimos con un estafador inmobiliario que era amiguísimo de Genaro".

"Fue en ese momento que el hombre del 5 me propuso que ya no saliera en vivo sino que grabara el programa para que él pudiera verlo antes. Por supuesto que me negué. Salí de Panamericana sabiendo que a Genaro le importaba un comino el periodismo. Su modelo era el de Televisa y el PRI y por eso decía, con voz doctrinaria, que la TV debía ayudar a sostener a los gobiernos. Esa era la 'filosofía' pulgosa del Tigre Azcárraga y la banda de chingados que le hizo el tundete al PRI por varias décadas". 

Sin embargo, Hildebrandt reconoce en parte del texto lo "brillante, audaz, innovador y decisivo" que fue Delgado Parker "en la creación de la industria televisiva del Perú", pero asimismo explica por qué este desprestigió la labor de la prensa, aún más durante la etapa fujimorista.

"El periodismo era para él un burdelillo donde debían pasar buenas horas los que cortaban el jamón. Por eso es que me muero de la risa ahora que escucho a madamases y a biógrafos rentados hablar del 'compromiso' que Genaro tuvo con la prensa (...) Fue el régimen de la década aciaga el que desató al Genaro que había estado tantos años conteniéndose. De allí salió el monstruo que llegó a ser. El monstruo que no le pagaba a tiempo ni a sus más leales camarógrafos y que un día, ante mi reclamo, me dijo: 'Pero es que así sienten más la camiseta'. El monstruo que lograba lo que quería en el poder judicial del chino Rodríguez Medrano después de pasar por la salita del SIN y vender mi cabeza a cambio de un par de sentencias dinerarias. El monstruo que despojó a parte de su familia de los derechos que tenía sobre las acciones de la compañía Celular 2000".

Se da tiempo también para recordar precisamente la acalorada discusión que tuvo en 1998 con un Genaro que "bebió más whisky de la cuenta en Miami" y llamó durante la emisión en vivo del programa Enlace Global que conducía en canal 13 y que terminó en renuncia.

"El problema era muy sencillo: el programa estaba diciendo cosas muy ásperas y desagradables, aunque ciertas, sobre el arreglo diplomático con el Ecuador y sobre la cesión de Tiwinza; entonces a Genaro no se le ocurrió nada mejor que desenchufarme durante varias noches consecutivas aduciendo que “problemas de fluido eléctrico” impedían la transmisión desde el morro solar, donde estaban las antenas. Y bien, Mariella Patriau fue, enviada por mí, al morro y comprobó, de boca de los vigilantes y técnicos, que en el morro no había ningún problema técnico o eléctrico (...) Y esa nota fue la que sacamos al aire aquella noche del desencuentro público. Eso fue lo que lo sacó de quicio".

Un capítulo de la televisión peruana al que en estos tiempos de Internet podemos recurrir cuantas veces queramos. 


Finalmente aclara la insinuación que el empresario hiciera hace algunos años respecto a un supuesto pago de dinero por parte de Vladimiro Montesinos.


"En una de sus últimas y penosas apariciones públicas intentó decir que Vladimiro Montesinos me había entregado 4 millones de dólares por mi salida de Panamericana. Le respondí de inmediato. El monstruo se había convertido en idiota. Triste final para un hombre genial a quien el Perú fue minando y Fujimori terminó de moldear. En estos días de homenajes hipócritas, biógrafos mercenarios y palmaditas de velorio, alguien tenía que decir lo que piensa". 


El registro audiovisual del Lugar de la Memoria (LUM) conserva el video de la reunión que Delgado Parker tuvo con Vladimiro Montesinos y el expremier Víctor Joy Way, donde propuso la salida de Hildebrandt "sosteniendo que ya tomó una decisión".


Foto de cabecera: Caretas

Notas relacionadas en LaMula.pe

Genaro Delgado Parker, el broadcaster de no pocas luces y muchas sombras [FOTOS Y VIDEOS]

Entrevista Parte 1 César Hildebrandt: "Nos han querido callar, pero no lo van a lograr"

Entrevista Parte 2 César Hildebrandt: "No creo que haya gobierno que le haya hecho más daño al Perú que el fujimorismo"

Del 'págame, Genaro' al baño de pintura: grandes momentos del 'reporteo' peruano