En política no hay coincidencias, se dice cada vez que surge un sainete como el que el que se acaba de conocer el domingo, cuando Cuarto Poder reveló que el Congreso, controlado por el fujimorismo, pasó por agua tibia la denuncia contra el contralor general de la República, Edgar Alarcón, interpuesta por un auditor de esa institución en agosto de 2016, referida a compras de vehículos de lujo que este alto funcionario realizó en los últimos años.

El programa en mención difundió un audio que compromete a Alarcón, porque en la conversación con el auditor Walter Grados Aliaga, su acusador, se evidencia que el contralor quiso bloquear la denuncia que ya había sido tramitada el año pasado ante la presidenta del Congreso, Luz Salgado

"¿Qué pasaría si es que retiras la denuncia del Congreso? (...) Piénsalo, Walter, no quiero presionarte, no te estoy hostilizando, no te estoy chantajeando. Entonces, por la amistad que tenemos, te digo, piénsalo".

La denuncia contra el contralor —elegido para el cargo con votos del fujimorismo— tiene que ver con los más de 90 vehículos de alta gama y de distintas marcas que adquirió, para acciones de compraventa, entre el 2002 y 2015. Pero el problema surge entre el 2013 y el 2015, cuando Alarcón ya era vicecontralor y compró nueve autos y camionetas por un valor total de US$182 mil, pero esa información no la consignó en su declaración jurada anual, tal como lo ley lo exige en su condición de alto funcionario del Estado. Pero además, Alarcón estaba impedido de hacer este tipo de operaciones comerciales, según la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Control y de la Contraloría de la República.

Grados Aliaga, como auditor de la Contraloría, estuvo destacado a la comisión del Congreso que investigaba el tema de la "narcopolítica" en el 2015. En ese proceso accedió a información que le generó sospechas respecto a Alarcón. Fue así que lo denunció en agosto del 2016 en el Legislativo.

Pero la acusación contra el contralor se diluyó en el Congreso, tras ser derivada a la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, a cargo de la fujimorista Karina Beteta. Este grupo archivó el caso por criterios formales, pero las acusaciones de fondo nunca se investigaron. 

Según explicó la misma Beteta, el subgrupo que preside no tenía competencia para ver el caso, porque se remitía a hechos de cuando era Alarcón eea vicecontralor y no contralor. "Vimos la parte formal, no ingresamos al fondo de la materia porque no era necesario referirnos al tema", alegó la legisladora este lunes en RPP.

Pero el tema tampoco pasó por la Comisión de Fiscalización, que preside otro fujimorista, Héctor Becerril, quien con un tuit le sacó el cuerpo al tema. Y así, la denuncia terminó debajo de la alfombra.


Puesta en evidencia la 'buena suerte' de Alarcón en el Congreso, Luz Salgado no tuvo otra opción que dar la cara y afirmar que "no hay ánimo de archivar" el caso, pero justificó la decisión de rechazar por "unanimidad" la denuncia del subgrupo que dirige su colega Beteta, al confirmar que no procedió por un tema "de forma y no de fondo".

"Tenemos una serie de temas pendientes por ver. Quiero dejar claro que no hay ánimo de archivar la denuncia o pasar por alto las cosas",  alegó Salgado en Cuarto Poder, tras anunciar que la denuncia ahora será vista en la Comisión Permanente del Congreso.

"También en las instancias correspondientes. El Ministerio Público tiene que hacer la investigación correspondiente. El caso lo puede ver también el Ministerio Público", anotó. "Aquí no hay afán de proteger a nadie. No se está tratando de proteger a nadie", insistió.

Pero hay quienes tienen legítimas dudas al respecto y así lo expresaron en Twitter.





DATOS

► El contralor Edgar Alarcón alegó que las acusaciones en su contra por compras sospechosas de vehículos de lujo son represalias por el polémico informe sobre el aeropuerto de Chinchero.

"Esta denuncia ingresó en paralelo al Congreso y a la PCM […] Tomo esa parte [de amenazas que se me hicieron], ‘te voy a dar donde más te duele’. Y donde más me duele, en realidad, es en mi vida familiar, personal, se están metiendo con mis hijos. Si Chinchero ha generado todo este problema, como dicen los jóvenes, qué piña, pues. Pero yo voy a seguir con mi trabajo firme en el compromiso que tengo con el país", alegó en Panorama.

Lee también:

Los fierros del Contralor: los negocios que Edgar Alarcón quiso ocultar

La Contraloría transgredió sus propios límites en el informe sobre Chinchero, según expertos

Especialistas dicen que no prosperará denuncia penal contra funcionarios por adenda de Chinchero

Contraloría incluyó a Vizcarra en su informe sobre Chinchero, pero no le atribuye responsabilidad penal