David Blanco Bonilla / EFE
La historia del inicio del periodismo en América deberá retroceder varios años tras el hallazgo en Nueva York del "Diario de Noticias Sobresalientes de Lima y Noticias de Europa", una publicación periódica que apareció en 1700 en la antigua capital del virreinato del Perú.
De acuerdo a su fecha de publicación, el "Diario de Noticias Sobresalientes de Lima" antecede a las hasta ahora más antiguas publicaciones periódicas del continente, como el Boston Newsletter (1704), la Gaceta de México (1722) y la Gaceta de Lima (1743).
Un primer tomo que recoge los ejemplares de ese diario, impreso en los talleres de José de Contreras y Alvarado entre 1700 y 1711, fue presentado esta semana en la Universidad del Pacífico de Lima, tras un trabajo de una década encabezado por los investigadores peruanos Paul Firbas, de la universidad de Stony Brook, en Nueva York, y José Rodríguez Garrido, de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
"Esta es, en efecto, la publicación periódica más antigua de las américas conocida hasta hoy, que se produce en el contexto de la guerra europea para consolidar las alianzas y la fidelidad local al rey Felipe V", declaró a Efe Firbas, quien encontró la publicación a fines de los años 90 en la Biblioteca Pública de Nueva York.
Agregó que este periódico "es como la primera versión de lo que después se va a convertir en la Gaceta de Lima, e indirectamente, de la Gaceta de México" que, según recordó, en su primer número señaló que salía "a imitación de lo que se está haciendo en Lima".
La publicación periódica se salvó para la historia porque probablemente el mismo Contreras y Alvarado, quien pertenecía a una familia de impresores que comenzó su abuelo, llegado de Sevilla a Lima en 1620, decidió juntarla en un tomo, uno de cuyos ejemplares permaneció hasta nuestra época en la biblioteca de Nueva York.
El volumen original "contiene unas 1.000 páginas en total, con los diarios de Lima, noticias de Europa y una serie de impresos que serían como la extensión de las noticias", acotó Firbas.
En ese sentido, el periódico muestra "la incertidumbre enorme que produce en América la muerte de Carlos II", el último rey de los Habsburgo, quien es seguido por Felipe V, el primer rey Borbón.
"Esto, que parece una cosa lejana, europea, está completamente presente en toda la trama. El diario nos permite entender hasta qué punto esto es una crisis y se utiliza por primera vez oficialmente a la prensa periódica como un órgano de afirmación de una política de apoyo a una facción, que es la de los borbones", añadió.
El documento es, además, "una herramienta fundamental para la historia" de Lima y el extenso virreinato del Perú, desde Panamá hasta Buenos Aires, porque muestra cómo la cultura popular también "está presente e interactúa constantemente con la elite".
Los investigadores peruanos comenzaron, al frente de un equipo, el trabajo de transcripción del periódico en 2007 para obtener una edición que no es facsimilar, sino modernizada, "respetando todas las características de la lengua de la época".
El objetivo fue "darle un carácter de texto consagrado canónico" al hallazgo, por lo que se incluye un detallado estudio del diario y su contexto, y también ha sido publicado en internet por el Instituto de Estudios Auriseculares (IDEA) de Nueva York.
Firbas dijo que para enero próximo planean tener la segunda parte y, luego, un tercer volumen que incluirá las actas de un congreso que preparan con la participación de especialistas de América y Europa.
"Es un orgullo para los peruanos poder decir que contamos con este material que demuestra la vitalidad de la cultura en Lima, los usos que se daban a la imprenta, la participación de todo este grupo de criollos alrededor del taller de Contreras y Alvarado", resaltó.
Rodríguez Garrido destacó, a su turno, el apoyo de la PUCP a este proyecto que, según enfatizó, "reconfigura" el conocimiento "sobre la historia del periodismo y las prácticas editoriales en América".
Martina Vinatea, directora del Proyecto Estudios Indianos de la Universidad del Pacífico, que colaboró en el proceso editorial del libro, coincidió en señalar a Efe que, a partir de este hallazgo, "la historia del periodismo se va a tener que reescribir" y lo calificó de "un hito importantísimo".