Si el Estado peruano decide que Odebrecht debe irse del país, la empresa brasileña lo hará, explicó este domingo el presidente de Odebrecht Latinvest en Perú, Mauricio Cruz.
En diciembre del año pasado, la empresa brasileña confesó haber pagado al menos 29 millones de dólares en coimas a funcionarios peruanos entre el 2005 y 2014. Marcelo Odebrecht, exgerente de la compañía, se encuentra actualmente preso en Brasil por corrupción.
En una entrevista al diario El Comercio, Cruz, afirmó que "el daño (por los actos de corrupción) es mucho más grande de lo que podría ser porque hay reacciones muy radicales que nos parecen innecesarias, como la paralización de proyectos".
"Si la decisión es que Odebrecht tiene que irse (del Perú), vamos a tener que hacerlo porque no podemos enfrentarnos al Estado", señaló.
Cruz lamentó la suspensión de la construcción del Gasoducto Sur Peruano, de un consorcio conformado por Odebrecht, la española Enagás y la peruana Graña y Montero. Precisó que esto generó una deuda de 300 millones de dólares con 900 proveedores y bancos, y que el proyecto se quedó en un avance del 40%.
Además, sostuvo que no logró vender su partición en el mismo porque "no hubo nadie (en el gobierno) que les diera tranquilidad a los compradores".
Según Cruz, en el contrato del Gasoducto Sur Peruano, firmado durante el gobierno de Olllanta Humala en 2014, "no se halló ningún acto de corrupción" y que la entrega de dinero al Partido Nacionalista fue "una colaboración con la campaña política que no tuvo nada que ver con la licitación del GSP".
Actualmente, Humala Tasso es investigado por presunto lavado de activos por los aportes de Odebrecht a su campaña electoral del 2011.
(Foto de portada: Agencia Efe)
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