Con 66 votos a favor y 29 votos en contra, el Congreso de Perú consumó su homofobia. Debido a una iniciativa de las bancadas fujimorista (Fuerza Popular), aprista (CPA) y de Alianza Para el Progreso (APP), el Parlamento debatió desde la noche del jueves hasta la madrugada de este viernes, la derogatoria del Decreto Legislativo 1323, que protegía a las personas LGTBI y las mujeres de los crímenes de odio a través del endurecimiento de las penas contra los agresores u homicidas.
En el debate, el defensor de la derogatoria, el fujimorista Miguel Torres acusó de que este DL era una "norma asolapada". "No más normas que esquiven discusión, no más normas de este tipo", dijo el presidente de la Comisión de Constitución. El argumento fujimorista era que esta no era materia a legislar, ya que el tema era seguridad ciudadana. Pero, ¿acaso proteger a una población vulnerable como los LGTBI no es un asunto de seguridad ciudadana? ¿Acaso no es deber del Estado peruano cuidar la vida y la integridad de sus ciudadanos? ¿O los LGTBI no son ciudadanos para los fujimoristas?
Desde la otra orilla, los congresistas Marisa Glave y Marco Arana (Frente Amplio), Alberto de Belaunde y Mercedez Aráoz (PPK) defendieron los derechos de las personas LGTBI y pidieron a los demás congresistas que dejen de lado sus fanatismos religiosos, que dejen de discriminar y tomen conciencia de que los parlamentarios están para representar a los ciudadanos.
Glave resaltó que las Naciones Unidas tiene reportes de violencia de género y de homofobia. Y Arana recordó casos de discriminación histórica como los analfabetos y las mujeres y sus derechos a votar. En un mensaje a otros religiosos en el Parlamento, Arana dijo que "no todos los creyentes somos fundamentalistas". "Desde una fe que promueve el amor, no podemos discriminar", afirmó.
Rosas, conocido por su fanatismo religioso y su homofobia, dijo que los temas de género tenían que ver con atracciones y sentimientos y que estos no podían ser sujetos de derechos ni jurisdicción. "Los conceptos de identidad de género no están dentro de la Constitución porque son atracciones", señaló. "No se puede censurar a la palabra de Dios, cuando uno lee la Biblia, con una ley", agregó.
Los congresistas fujimoristas serán recordados por ser cómplices de los crímenes de odio que se cometan contra personas LGTBI.