La Planta de Tratamiento de Agua de Huachipa, la cual se licitó y empezó a ejecutar durante el gobierno de Alan García, obra en la que se invirtió 304 millones 600 mil dólares, aún no está terminada. Este martes, el presidente Pedro Pablo Kuczynski estuvo ahí y lo comprobó: “Está a medio hacer”.  

“Hay que terminar la planta porque son cinco etapas más abajo y esos reservorios se tienen que construir”, subrayó el mandatario.

PPK estimó además que en dos años esta planta debe estar en pleno funcionamiento, pese a que fue inaugurada en julio del 2011, por el entonces presidente Alan García. La obra está diseñada para tratar y procesar 10 m3/segundo, pero solo procesa 1.3 m3/s. Y lo peor es que la población de Lima consume 25 m3/s.

“La planta de agua potable tiene un problema de diseño, hay un problema de disputa con los constructores (un arbitraje) y faltan las redes que van a absorber el agua”, expresó el mandatario.

La Planta de Tratamiento de Huachipa se divide en tres componentes: la bocatoma, la planta de Tratamiento de Agua y el Ramal Norte. Esta obra beneficia a cerca de 500,000 personas de los distritos de Comas y Carabayllo.

Debido de los desbordes del río Huaycoloro se activó el seguro por siniestros de la planta. En el recorrido del presidente se conoció que este se encuentra en evaluación.

Como se sabe, la Contraloría General de la República se encuentra investigando esta obra y ha encontrado cinco irregularidades en el contrato del proyecto. Según estas indagaciones, las irregularidades habrían ocasionado un perjuicio económico de 91.8 millones de soles al Estado peruano.

(Foto de portada: Andina)

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