La exvoleybolista Jessica Tejada regresó a Lima poco después de las 7 a.m., procedente de Miami, EEUU, a donde viajó con su pareja, el exviceministro de Comunicaciones Jorge Cuba, el 24 de diciembre último, tres días después de que se hiciera público que Odebrecht admitió el pago sobornos a funcionarios en el Perú por obras públicas, caso en el que ambos están implicados.
Tras ser acusado de recibir US$2 millones en coimas de la constructora brasileña por la adjudicación del Metro de Lima en el 2009, y de que se dicte una orden de captura internacional en su contra, Cuba regresó la semana pasada al país, fue detenido y recluido en Piedras Gordas. Ahora evalúa la posibilidad de acogerse a la colaboración eficaz para lograr beneficios al momento de su condena.
Luego de su arribo, Tejada, con el rostro desencajado, ingresó rápidamente a un auto y se fue a su casa. No fue detenida, pues aún no se resuelve la solicitud de 18 meses de prisión preventiva que pidió la Fiscalía contra Tejada. El pedido ya se formalizó y será discutido este sábado 4 de enero por la Sala Penal Nacional a cargo del juez Richard Concepción Carhuancho.
La prisión preventiva solicitada por la Fiscalía responde a la participación de Tejada en las cuentas offshore que creó Cuba en las que recibió las coimas por los tramos 1 y 2 de Línea 1 del Metro de Lima. Según documentos en manos del Ministerio Público, es beneficiaria del 35% en la empresa Hispamar International Inc.
De acuerdo a El Comercio, Tejada también trabajó en el área de Registro y Control de Personal del Congreso de la República, entre noviembre del 2015 y julio del 2016, con un sueldo mensual de S/2.598. Asimismo, entre el 2011 y 2014, brindó talleres deportivos en las municipalidades de Bellavista y Breña. Curiosamente, el alcalde de este último distrito era José Antonio Gordillo fue elegido por el Partido Aprista.
(Foto de portada: La República)
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