En las últimas horas han surgido críticas al Instituto Prensa y Sociedad (Ipys), por la donación de US$ 220,150  que recibió de Odebrecht el 2014 para financiar los Premios Nacionales de Periodismo que, desde hace tres años, entregan el Ipys y la PUCP. 

Ante esta arremetida, que incluyó la difusión en redes sociales del contrato de donación en mención, el presidente del Ipys, Augusto Álvarez Rodrich, quien ocupa ese cargo desde 2012, hizo algunas precisiones y aclaraciones al respecto.

Álvarez Ródrich sostuvo que quienes está detrás de estos ataques son "sectores políticos vinculados a los sobornos pagados por Odebrecht para desprestigiar al periodismo independiente con el fin de mellar la potencia de sus denuncias sobre la corrupción".

Precisó que, en efecto, el dinero que Odebrecht donó sirvió para el lanzamiento y la organización de los premios en el 2014, y parte del 2015, cuando el convenio, que era público y transparente desde hace tres años, se rescindió por el escándalo del caso Lava Jato en que está implicada la constructora brasileña.

"Corresponde a un acuerdo por dos años, rescindido en junio del 2015, rescisión que fue publicada en su momento, ante las evidencias de corrupción de la empresa aparecidas en Brasil (...) A partir de junio del 2015, y hasta ahora, los premios son auspiciados por otras empresas e instituciones, según puede apreciarse en la página web de esta actividad", escribió en su columna de La República.

Álvarez Rodrich aclaró, además, que siempre hubo transparencia de la donación por parte del Ipys:

"Pero no solo eso, pues, como fue establecido en el convenio, el origen del financiamiento nunca comprometió la independencia del Ipys en el cumplimiento de su misión, ni la orientación de los premios, siendo la temática de los trabajos presentados absolutamente libre, lo cual, además, estuvo garantizado por la calidad de los jurados para cada categoría y del comité de premios".

Subrayó también que los recursos que entregó Odebrecht no fueron para ningún directivo del Ipys y que su destino, que fue rigurosamente supervisado, se destinó para financiar los premios y la organización del concurso.

"Se puede discutir la conveniencia de la aceptación de la donación de Odebrecht, pero, como se ve, eso no puede poner en duda la transparencia del origen y uso de los recursos, ni la calidad y reconocimiento de un premio que celebra, cada año, lo mejor del periodismo nacional".

Para Álvarez Rodrich, el objetivo del Apra, en cuyo último gobierno Odebrecht pagó sobornos a funcionarios, y el fujimorismo, que cuenta con una larga trayectoria de "destrucción del periodismo", como lo hicieron los 90, es dañar las investigaciones independientes que denuncian y destapan la corrupción en el país. 

Ante esta situación, las preguntas obligatorias y que muchos van respondiendo desde su perspectiva es: ¿Hubo una 'donación' intencionada?, ¿se debe aceptar financiamiento de empresas en el periodismo?

Gustavo Gorriti, predecesor de Álvarez Rodrich en Ipys, hizo lo suyo y publicó una columna en la revista Caretas, en la cual recuerda que los códigos de ética de los medios periodísticos tienen como máxima evitar los conflictos de intereses y no deberle nada a un potencial investigado.

"No hacerle “media training”, ni consultoría ni asesoría ni nada parecido a quien, por lo que es, por lo que hace, pueda en algún momento ser necesario investigar"

Para el periodista, "aceptar – y quizá buscar– el auspicio de Odebrecht en 2014 y 2015 para un concurso periodístico representó no solo un conflicto de interés sino un ataque implícito a los valores básicos del periodismo", ya que existían investigaciones previas sobre la constructora.

Asimismo, reveló que su salida y desligue total de la institución se debió a discrepancias sobre ética periodística; y que de acuerdo a la información que maneja, la rescisión del auspicio que menciona Álvarez Rodrich fue iniciativa de Odebrecht.  

Rosa María Palacios también se manifestó mediante un tuit y deslindó de Ipys:  

Por su parte, Patricia del Río manifestó a través de su cuenta de Twitter que los periodistas "mermeleros" no tienen lugar en Ipys:

Nicolás Lucar se sumó a la ola de comentarios:

(Foto de portada: Andina)

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