Este viernes se desató un tiroteo minutos antes de la una de la tarde (hora local) en el aeropuerto internacional de Fort Lauderdale, una ciudad al sur del estado de la Florida integrada en la zona metropolitana de Miami. Según información oficial de las autoridades fallecieron cinco personas y otras 13 resultaron heridas.

El atacante, que ya está bajo custodio policial, había llegado al referido aeropuerto en un vuelo procedente de Canadá y portaba un arma en su equipaje, la cual había declarado. Entró al baño a cargarla y salió a disparar a mansalva en la zona donde los pasajeros recogen su equipaje. Imágenes que los mismos usuarios subieron a internet mostraron escenas de terror y pánico.

Cientos de pasajeros y empleados del aeropuerto fueron evacuados a las pistas del aeródromo. Las imágenes de televisión han mostrado el momento en que los paramédicos transportaban a uno de los heridos, que iba en camilla sangrando. Luego de que se informara de la detención del atacante, se escucharon disparos en la zona del garaje del aeropuerto del sur de Florida, según informó la Dirección de Seguridad en el Transporte (TSA, por su sigla en inglés). Por ello se especuló de que habría otro tirador. Este incidente aún está siendo investigado.

El senador de Florida Bill Nelson declaró a medios locales que el tirador ha sido identificado como Esteban Santiago, quien portaba una identificación militar. Eso es lo que explicaría el hecho de que no haya tenido problemas para llevar un arma en su equipaje. El atacante tiene 26 años y es natural de Nueva Jersey.

Las autoridades estadounidenses informaron que el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood, por el que pasan al día entre 80.000 y 100.000 viajeros, canceló todas sus operaciones hasta nuevo aviso.

Scott Israel, alguacil del condado de Broward, donde se encuentra el aeropuerto de Fort Lauderdale, dijo hoy que es "demasiado pronto" para saber si el tiroteo es un acto de terrorismo. "El FBI tendrá que determinarlo", anotó. En tanto, George Piro, de la oficina del FBI en Miami, confirmó que la investigación está en una "fase muy inicial" y, por lo tanto, es prematuro determinar el motivo del ataque.

El presidente electo Donald Trump reaccionó en Twitter sobre estos sucesos de terror en Florida. "Nuestros pensamientos y plegarias están con ellos". A través de la misma red social, Ari Fleischer, exsecretario de prensa de la Casa Blanca en la gestión de George W. Bush, estaba en el aeropuerto al momento del incidente: "Estoy en el aeropuerto de Fort Lauderdale. Acaban de disparar. Está todo el mundo corriendo".

Florida, con 20 millones de habitantes, es uno de los estados más permisivos para comprar armas y poder llevarlas encima. 

Desde los atentados del 11-S, en el 2001, la seguridad en todos los aeropuertos de EEUU se extremó, con el fin de ejercer un mayor control sobre los pasajeros y evitar ataques similares. Desde entonces no se habían registrado incidentes serios, salvo uno en 2013, en el aeropuerto de Los Ángeles, donde un hombre mató a tiros a un policía e hirió a otros antes de ser detenido.


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