Paulatinamente, los conflictos sociales ante los proyectos de actividades extractivas vienen estallando en estos primeros casi cuatro meses del gobierno de Pedro Pablo Kuczynski. El primero fue el de Las Bambas, donde hubo un muerto; y el siguiente en Pataz.
Ahora se ha desatado un tercer conflicto, esta vez en el distrito de Quiñota, provincia de Chumbivilcas, en la región Cusco, ante un proyecto ejecutado por la empresa Anabi, donde se produjo un incendio que destruyó cinco pabellones del campamento de dicha minera.
El incendio no dejó ningún trabajador herido. Previo a esto, el último miércoles 9 los habitantes de Quiñota, junto a los de Pumallacta y Collona, tomaron este asentamiento minero, puesto que el diálogo entre estos y la minera, para atender sus reclamos, había sido suspendido.
Según las comunidades, Anabi no cumplió con algunos compromisos, y que por ello el proyecto minero en Quiñota no contaba con licencia social; con la única excepción de los habitantes de Huaquira.
Luego del desbloqueo de la vía que conduce al asentamiento minero, la Policía y la Fiscalía Penal de Santo Tomas constataron los daños. Al respecto, el coronel José Olivera Muñoz, jefe del Frente Policial Espinar, informó:
"El campamento está totalmente quemado, no hay ninguna operación. Hemos recuperado el control. No puedo decir quiénes han sido mientras se investigue, porque hemos hecho la constatación con el fiscal de todos los daños".
Por su parte, el alcalde de Quiñota, Calisto Ccahuana, exoneró a los habitantes del distrito de haber producido este incendio:
“Ellos dicen que no han sido, quizás hubo otros interesados en provocar la quema”.
Luego de estos hechos, los dirigentes de las comunidades de Chumbivilcas acordaron invitar al jefe de gabinete, Fernando Zavala; al Defensor del Pueblo, Walter Gutiérrez; y al gobernador regional del Cusco, Edwin Licona; a fin de iniciar una nueva mesa de diálogo, que comenzaría este lunes 14. Sin embargo, las autoridades mencionadas aún no han respondido a esta invitación.
Asimismo, también realizarán conversaciones con los comuneros de Huaquira, quienes sí han dado licencia social al proyecto, para que puedan sumarse al diálogo y constituir una sola plataforma.
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