Del 13 al 16 de octubre, se realizará el VI Congreso Iberoamericano de Animación Sociocultural, que tendrá lugar en la sede principal de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), y es organizado por la Red Iberoamericana de Animación Sociocultural, con el apoyo de la YMCA Perú.

La presidenta del capítulo peruano de esta Red, Rosa Valencia; y el secretario general de YMCA Perú, Raúl Salas, dialogaron con Lamula.pe acerca de cómo la animación sociocultura puede ayudar a generar espacios para la gente y contrarrestar así la creciente inseguridad ciudadana que nos afecta diariamente.

¿En qué consiste este concepto de animación sociocultural?

Rosa Valencia: El alma de la animación sociocultural tiene que ver con palabras claves como democracia cultural, transformación social, inclusión, ciudadanía plena. Todo esto debe ser vinculado al entorno territorial, sus actores sociales y políticos, la comunidad educativa. Durante 17 años he sido funcionaria municipal, y creo que si orquestamos todo esto sería un gran avance para generar espacio público y combatir la inseguridad. Sin embargo, se cambia de gobernante y no se continúan los procesos. La inseguridad que existe se debe a la ausencia de un plan consensuado y de políticas públicas. Por eso es que desarrollamos este congreso.

¿Como se relaciona este concepto con el contexto que inseguridad ciudadana que vivimos?

RV: Es importante que los colegios, universidades, municipios y sociedad civil puedan capacitarse y descubrir competencias para generar más espacios públicos para la gente. No vamos a lograr nada por más estado de emergencia que se pongan, mientras la gente siga con miedo y no se organice. Hay que identificar y potenciar las capacidades y saberes de las comunidades. Las grandes unidades escolares, por ejemplo, abrían las puertas a la comunidad. En un tiempo el Ministerio de Educación buscó generar escuelas abiertas, que se generaban luego del fin del horario escolar dando talleres y cursos para la comunidades. Así también se generan espacios seguros.

La inseguridad que vivimos, ¿es una percepción como diría algún exministro hace años, o es un problema real que la gente lo siente? 

Raúl Salas: Sí es un problema real. Todos los días tenemos noticias de muertes, de asaltos, maltrato a la mujer. Vivimos una cultura muy violenta, y la propuesta de animación cultural busca que todo esto cambie. Lo que se ha hecho hasta ahora no ha dado resultados. Con este congreso buscamos que la gente genere espacios para solucionar conflictos, aceptando sus diferencias; y que aprenda a convivir y relacionarse en paz, desde experiencias como el arte, el deporte, la participación. Así podemos responder ante una sociedad convulsionada; no podemos seguir haciendo lo mismo. Escucharemos propuestas que nos interesen, y así abrir espacios de conversación para generar ideas nuevas.

¿Por qué en vez de organizarse para reducir la inseguridad, la gente prefiere la mano dura?

RV: No somos una sociedad que analice, en forma organizada, lo que es más saludable, y cómo se genera una cultura participativa para tener calidad de vida. Los intelectuales analizan estas cosas en los cafés, pero todo queda allí. El asunto es ver cómo la gente es protagonista del cambio. Es un vacío que debemos asumir. Es una pena que los Centros de Cultura, Recreación y Educación Ambiental (CREA) se hayan cortado, pues en dos años se logró que más de un millón de niños y jóvenes tuvieran espacios donde tuvieran acceso al teatro, a las galerías de arte, sus anfiteatros. Y se generó espacios para la familia, especialmente los domingos. Esto tendría que retomarse desde el gobierno metropolitano.

RS: Cuando un joven se porta mal en el colegio se le castiga, pero nadie pregunta qué hace que tenga esa conducta: de repente tiene a sus padres separados, o vive solo. Nos fijamos más en el síntoma que en la causa del problema, y entonces castigamos. Hay que ver qué ocurre con el ser humano. No se puede castigar el error. Ya vemos que las cárceles no regeneran a nadie. Por eso, hay que invertir más en prevención. 

Estas ideas, ¿cómo se aterrizan en la sociedad y dejan de ser una "conversa de café" entre intelectuales?

RS: Si las municipalidades empiezan a ver que sus "casas de la juventud" como centro catalizador del potencial de los jóvenes, y los ven como animadores culturales, se generan más espacios seguros. Si tocamos la puerta de las municipalidades para juntarnos con los colegios, y hacer talleres para los jóvenes, y generar clubes mediante el arte y el deporte, eso va a generar que se organicen y sean protagonistas del cambio. Eso nos está faltando. Y no es un tema de dinero, sino de visión y gestión.

Más información sobre el VI Congreso aquí.

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