Todo parecía indicar que Fuerza Popular (FP), con su mayoría de 73 congresistas, iba a comportarse de manera obstruccionista desde el primer día de mandato del presidente Pedro Pablo Kuczynski. Sin embargo, la realidad muestra que por ahora esto no está ocurriendo.
La primera prueba de fuego fue en la sesión del pleno en la que el jefe de gabinete, Fernando Zavala, tuvo que esperar un día y medio para recibir el voto de confianza. Pese a que los fujimoristas se mostraron críticos, Zavala logró un apoyo casi unánime: 121 votos a favor. El voto en contra y las dos abstenciones corrieron por cuenta de tres parlamentarios del Frente Amplio (FA), pero el resto del bloque izquierdista votó a favor de Zavala.
En la Comisión de Presupuesto, presidida por la fujimorista Cecilia Chacón, se aprobó la propuesta del ministro de Economía, Alfredo Thorne, de proveer mayor flexibilidad a la política fiscal. Y poco después, el pleno aprobó la ampliación del plazo de liquidación de Doe Run, con 108 votos a favor y cinco abstenciones (cuatro de Acción Popular y una del FA).
¿A qué se debe tanta coincidencia, un mes después que Kuczynski se instalara en Palacio de Gobierno y del fujimorismo controlando el Congreso? Unos datos de adentro conseguidos por Lamula.pe pueden explicar este panorama.
EL TIRA Y AFLOJE ENTRE EL "PPKAUSISMO" Y EL FUJIMORISMO
SALGADO Y BRUCE ANTES DE ASUMIR SUS ROLES EN EL CONGRESO.
Para llegar a este nivel de consenso, está claro que existen negociaciones "tras bambalinas". En Peruanos por el Kambio (PPK), partido de gobierno, acordaron que Carlos Bruce sea quien negocie con los fujimoristas con el fin de que aprueben ciertos proyectos de ley, aunque estos últimos son los que tienen la iniciativa.
Dentro de la bancada "ppkausa" no todos están contentos con el papel que ha asumido Bruce, como es el caso de Gino Costa y Alberto de Belaunde. Sin embargo, por ahora todos en PPK están alineados.
Por el lado de FP, pese a que la vocería la llevan Lourdes Alcorta y Luis Galarreta, la que manda es la presidenta del Congreso, Luz Salgado. Su papel se notó el día del voto de confianza de Zavala, cuando Galarreta quiso instar a parte de la bancada a que vote por la abstención. "Aquí se vota verde, nos están dando lo que pedimos", habría dicho la titular del Parlamento, quien tuvo la última palabra.
LAS CONCESIONES AL FUJIMORISMO Y OTRAS PERLAS
En efecto, el gobierno de PPK estaría cediendo terreno ante el fujimorismo, que pretende "una cuota de poder", al presionar para que se coloquen algunos personajes cercanos a los "naranjas" en puestos públicos.
El caso más notorio fue el de Juan Díaz Dios, quien tuvo que renunciar, ante la evidencia, a su cargo de coordinador parlamentario de la Contralaría. Sin embargo, hace poco fue nombrado en ese mismo puesto, pero en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Héctor Pantigoso, quien fue asesor de Galarreta, ahora con la camiseta naranja, en el último período legislativo.
El gobierno de PPK tendría complicaciones al momento de aprobar el presupuesto de la República, ya que la comisión en el Parlamento es presidida por Chacón. Si el fujimorismo quiere, con su mayoría, podría reducir fondos a algunas iniciativas del gobierno para hacer obras o impulsar programas sociales, con el objetivo de socavar políticamente al régimen.
El tener el poder en dicha comisión mantiene cohesionado al fujimorismo, que por ahora no se partirá como han advertido algunos analistas políticos. Sobre el papel de Chacón, una fuente señaló que ella no es la que manda, sino que todo pasa por Salgado. Otra fuente señaló que Chacón misma negocia con el MEF.
EL APRA Y EL FUJIMORISMO
Otra bancada que, más que negociar, dialoga con los fujimoristas, es la del Apra. Casi "siameses" desde el período 2006-2011, cuando el presidente era Alan García; y en el período 2011-2016, como oposición a Ollanta Humala; el papel de ambas bancadas es hacer creer que el gobierno de PPK tiene rezagos de "humalismo". "Son casi un mismo grupo", nos refiere una fuente anónima.
Quien ha recibido el rol de conversar con FP es Javier Velásquez. Ambas bancadas coordinaron la moción de solidaridad por la "crisis" en Venezuela. Aunque como militante aprista disciplinado apoyó el tema (y otros más), Mauricio Mulder no ha querido "tragarse el sapo" de tomar el papel de Velásquez.
LAS OTRAS BANCADAS Y EL DEFENSOR DEL PUEBLO
Si bien al principio fueron notorias algunas diferencias al interior de la bancada del FA, tanto a nivel programático como en las votaciones, por ahora están alineados. Los intentos del Apra y FP por vincularlos con Humala (como lo han hecho con PPK) no han surtido ningún efecto.
En Acción Popular (AP), pese a ser solo cinco parlamentarios, hay dos tendencias. Una está más cercana a Víctor Andrés García Belaunde, y otra a Yonhy Lescano. Esto quedó evidenciado en la votación del caso Doe Run, en el que el primero votó a favor; mientras que el segundo fue acompañado por los otros tres parlamentarios, absteniéndose.
En cuanto a Alianza para el Progreso (APP), una versión indica que por fuera se mantiene como una bancada homogénea; pero al interior hay disputas porque algunos pretenderían irse al fujimorismo. Por ahora, están votando disciplinadamente.
Sin embargo, estas bancadas han tenido protagonismo en las propuestas para elegir al nuevo Defensor del Pueblo. AP ha propuesto a Enrique Mendoza; APP impulsó la candidatura de Walter Gutiérrez; y el FA ha postulado a Samuel Abad.
Lo curioso es que dos de los candidatos son cercanos al Apra: Mendoza, expresidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y compañero de colegio de Alan García; y Gutiérrez también ha tenido vínculos con el partido de la estrella. El fujimorismo no parece muy interesado en este tema.
LOS EXPERIMENTADOS
La mayoría de parlamentarios son nuevos, y quienes hacen sentir su peso son los que llevan años en el Parlamento, sin necesidad de presidir las comisiones. Tanto Alcorta y Galarreta, por el fujimorismo; García Belaunde, por AP; y Mulder y Velásquez, por el Apra, son los que llevan la voz cantante al momento de impulsar temas en los grupos de trabajo.
"Los presidentes de comisiones que son nuevos están perdidos en el espacio", nos refiere una fuente, que también nos cuenta que en algunos casos, se apoyan en asesores que han sido parlamentarios, como es el caso de Pedro Spadaro, Martha Chávez y Luisa Cuculiza, que yo no son congresistas pero actúan "bajo la sombra".
Por el lado del FA, Alberto Quintanilla (diputado entre 1985 y 1992) y Manuel Dammert (diputado entre 1980 y 1992, y nuevamente en el Congreso desde 2013) son los que llevan la iniciativa en base a su experiencia parlamentaria. Pese a que hace su debut en el Parlamento, Marisa Glave también aporta lo suyo, quizás por su paso como regidora por la Municipalidad de Lima.
Así están las cosas en el Congreso, un mes después de haberse inaugurado el período 2016-2021. Veremos qué resultados nos depara este toma y daca.
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