El paso de venezolanos a territorio Colombia fue masivo este domingo, como se esperaba, ante la grave crisis humanitaria que golpea al país llanero, por la falta de alimentos y medicinas, lo que obligó al presidente Nicolás Maduro a ceder y permitir la apertura de la frontera, que él mismo había ordenado cerrar, aunque sea solo día.

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Unas 35 mil personas las que ingresaron a la ciudad colombiana de Cúcuta, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, según datos de las autoridades colombianas, para comprar productos de primera necesidad: papel higiénico, aceite, azúcar, harina pan, café, leche, etc.

Cargaban con todo lo que podían. Los centros de abastos y comercios de Cúcuta lucieron abarrotados de personas. Muchos venezolanos llevaban esperando casi un año para este día y no saben cuándo podrán volver a pasar. Gastaron todo lo que llevaron: en promedio fueron dos salarios mínimos en Venezuela (15.000 bolívares mensuales, unos 15 dólares en la tasa del mercado negro).

EFE.

Desde madrugada del domingo, miles de venezolanos empezaron a llegar hasta el puente Simón Bolívar, que es uno de los cuatro pasos fronterizos para ingresar a Colombia, tras el anuncio que había hecho el gobernador de Táchira, quien el sábado anunció que Maduro había ordenado que “el cerco se levantara”.

Y así fue. Las autoridades chavistas no querían que se repita lo del jueves pasado, cuando un estampida de 500 mujeres, autodenominadas las Damas de Blanco, se enfrentaron a los agentes de la guardia venezolana y consiguieron romper el cero y cruzar a Cúcuta.

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Las expectativas se desbordaron

“Sabíamos que algo podía pasar, pero no esperábamos esta llegada tan masiva”, dijo David Castro, responsable administrativo del supermercado Los Montes, uno de los comercios de Cúcuta que vendió un 190% más que un domingo normal desde que se cerrara la frontera.

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La apertura de la frontera se tuvo que extender hasta las 20:00 horas locales, pese a que estaba previsto que solo sea hasta las 18:00 horas. Pero pasada las 14:00 horas las filas en los cuatro pasos fronterizos abiertos eran interminables. Miles de venezolanos aún no habían logrado cruzar a Cúcuta. Y esperaban hacerlo.

EFE.

Víctor Bautista, asesor en asuntos fronterizos de la Cancillería de Colombia, dijo que las mesas de trabajo con Venezuela continúan y en 20 días los cancilleres de ambos países se reunirán para tratar el tema de la reapertura de la frontera, que Maduro cerró, al alegar que dejarla abierta implicaba un riesgo de seguridad por la presencia -según dijo- de paramilitares colombianos en el territorio de su país.

De momento solo se mantienen los corredores humanitarios para escolares y enfermos que funcionan desde el pasado agosto, pero los venezolanos tienen la esperanza de que se vuelva a abrir la frontera, porque la situación que viven está al límite. 

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