La selección peruana perdió en la tanda de penaltis ante una Colombia de mayor peso y jerarquía, y dejó la Copa América Centenario con la frente en alto y entre aplausos. Ricardo Gareca apostó por jugadores del medio local, jóvenes, muchos de ellos en etapa de consolidación. Y ganó un equipo combativo, ordenado y con mucha intensidad para jugar y presionar.
El once nacional le hizo un partido inteligente a los colombianos, los desesperó, los puso en aprietos, y las diferencias saltaron recién en los tiros desde los 12 pasos. Los cafeteros, que tienen un plantel amplio y de trayectoria internacional, solo se impusieron después de los 90 reglamentarios.
Ahora hay que pensar en la Eliminatoria a Rusia 2018, que se afrontará con un envión anímico importante por lo hecho en EEUU, pero lo cierto es que falta mucho camino y trabajo para que la 'blanquirroja' pueda remontar en la clasificación sudamericana.
Y aunque está por verse si Gareca mantendrá su decisión de apostar por estos muchachos y continuar el recambio y la consolidación de este equipo, el balance de la Copa América es positivo por donde se le mire, y le deja una base importante de jugadores comprometidos, con Paolo Guerrero y Cristian Cueva como figuras y estandartes.
Además, las caras nuevas que no estaban en el radar hasta ahora, como Miguel Trauco, Aldo Corzo y Óscar Vílchez; El 'Tigre' recuperó para la selección a Alberto Rodríguez y Cristian Ramos confirmó que está la altura de las exigencias. Todos ellos claves para el orden defensivo de la selección, a la que solo le encajaron dos goles en toda la Copa América, a diferencia de los choques de eliminatoria, en los que recibió una media de dos goles en las primeras seis fechas. Y Pedro Gallese, de 26 años, se afianzó en el arco y ofreció las garantías necesarias.
Hasta aquí, Gareca parece tener resuelto el tema defensivo, pero el equipo dejó la sensación de que le falta peso ofensivo, a pesar de que Cueva, Edison Flores y el mismo Guerrero tuvieron destellos y dieron muestras de su potencial. Quizá ello obligue al seleccionador argentino a recurrir otra vez a figuras como André Carrillo y Jefferson Farfán para la eliminatoria.
El 'Tigre' Gareca sostuvo que le gustaría trabajar en dos líneas, la de "automatizar movimientos" para evitar algunos errores habituales en el último pase y la de dotar de libertad a los hombres de ataque para que desarrollen su "inventiva".
En la eliminatoria hay mucho por hacer: 12 partidos y 36 puntos por disputarse. Perú es octavo, tiene cuatro puntos y está obligado a remontar al menos seis con respecto a Chile, que ocupa el cuarto y último puesto que da acceso a Rusia 2018.
Los próximos encuentros clasificatorios serán en setiempre, ante Bolivia de visita y Ecuador en casa. El objetivo primordial de Gareca es el Mundial, al que no vamos desde 1982. "El futuro de la selección está asegurado", dijo Óscar Vílchez, una de las caras nuevas del equipo, aunque ya con 30 años cumplidos.
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(Foto de cabecera: EFE)