Para el jefe de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Alberto Otárola, el Gobierno deja la "valla muy alta" en materia de lucha contra el tráfico ilícito de drogas. 

En conversación con la revista Poder, el funcionario destacó que la gestión de Ollanta Humala tiene muy buenos indicadores en el combate de esta actividad que se ha convertido en un verdadero flagelo para nuestra sociedad. 

Otárola- al frente de la citada institución desde mayo del 2014- señaló, entre los principales logros, la reducción de 110 mil hectáreas erradicadas (más de 82 mil durante su gestión). A su vez, se han generado US$ 250 millones en divisas por concepto de exportación de café y cacao que se han constituido en una alternativa para los excocaleros. 

El Estado, detalló, también se ha hecho presente con la construcción de más 1500 kilómetros de caminos y carreteras, así como la entrega de 55 mil títulos de propiedad a los cocaleros. La asistencia social-técnica y la seguridad territorial también son temas -aseveró- se han reforzado. 

Con el transfondo de estas medidas, Otárola se animó a dar algunas recomendaciones para la gestión ejecutiva de Pedro Pablo Kuczynski que iniciará el próximo 28 de julio. En primer lugar, consideró que se debe entrar "con toda la energía y con todo el apoyo" a los focos en los que aún existe la siembra de coca ilegal, haciendo hincapié en los temas de interdicción y rutas (de traslado de drogas). 

Asimismo, recordó que el tráfico ilícito de drogas está relacionada con el lavado de activos. En esa línea, consideró importante el fortalecimiento de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF). "Esta debe ser una entidad independiente de la Superintendencia de Banca y Seguros", manifestó. 

ESTAR ALERTA

Otárola expresó también que, si bien se ha evitado el agudizamiento de conflictos sociales, no deben subestimar algunos sucesos reportados el año pasado como el paro de cocaleros en Aguaytía (Padre Abad, Ucayali) a raíz de los posibles efectos del decreto legislativo 1241(que sanciona la resiembra de coca). 

No hay que olvidar, además, que en julio del 2015, la Federación de Productores Agrarios del Valle del Río Apurímac y Ene (Fepavraem) demandó la reformulación del modelo de reconversión productiva (parte del Desarrollo Alternativo). 

[Foto de portada: Andina]

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