El abogado de la presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, entregó hoy a la comisión del Senado a cargo del juicio político el alegato de su defensa, que incluye polémicas grabaciones que derrumbaron a dos ministros del mandatario interino, Michel Temer.
La defensa de Rousseff, volcada en 372 páginas de documentos, fue entregada por José Eduardo Cardozo, quien fue ministro de Justicia y Abogado General del Estado durante su Gobierno y ahora se dedica exclusivamente a representarla en el proceso.
En el texto, la defensa reitera todos los argumentos ya usados ante la Cámara de Diputados y el Senado, que en ambos casos fueron rechazados y califican como "faltas" administrativas las maniobras fiscales que configuran los cargos.
Esas maniobras, según la acusación, le permitieron al Gobierno falsear sus resultados en 2014 y 2015 y alterar los presupuestos mediante decretos, todo lo cual está prohibido por ley, y configuran un "crimen de responsabilidad", que es como define la Constitución las causas que pueden provocar la destitución de un mandatario.
La defensa también insiste en que el inicio del proceso estuvo en una "venganza" del entonces presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, ahora suspendido de su cargo por alegada corrupción y que fue quien aceptó a trámite las acusaciones.
Esa hipótesis sostiene que Cunha pidió apoyo a Rousseff frente a un proceso interno en la Cámara de Diputados que le puede costar el escaño y que, como ésta se lo negó, decidió darle curso al trámite contra la mandataria.
Pese a repetir todos los argumentos, los documentos incluyen un elemento nuevo, como son las grabaciones filtradas por la prensa local en las que se escucha a dos ministros designados por Temer criticar las investigaciones en la petrolera estatal Petrobras.
Se trata de los ya exministros de las carteras de Planificación, Romero Jucá, y Transparencia, Fabiano Silveira, quienes se vieron obligados a renunciar una vez que se conocieron las grabaciones.
En el caso de Jucá, se le escucha decir que una vez que Temer asuma el Gobierno en lugar de Rousseff, será necesario "delimitar" esas investigaciones, que afectan a políticos de todo el arco parlamentario y a una veintena de empresas privadas.
Silveira, por su parte, critica la forma en que se conducen las investigaciones y llega a aconsejar a algunos de los implicados en cuanto a las líneas de defensa que deben adoptar.
Aunque ambas grabaciones fueron hechas hace meses, su divulgación ahora generó la primera gran crisis del Gobierno interino de Temer y le costó el cargo a ambos, aunque para Cardozo constituyen la prueba de que el proceso contra Rousseff es un "golpe".
Según la defensa de la mandataria suspendida, las declaraciones de ambos en esas conversaciones "comprueban" la tesis de que uno de los objetivos del proceso es obstruir la acción de la justicia y "proteger" a los culpables de la corrupción en Petrobras.
La defensa de Rousseff fue entregada en vísperas de una reunión de la comisión responsable del juicio político, que este jueves deberá discutir el cronograma propuesto por el senador instructor del caso, Antonio Anastasia, para las próximas fases del trámite parlamentario.
Ese calendario plantea que el pleno del Senado se pronunciaría sobre el caso entre los próximos 1 y 2 de agosto, una vez concluida toda la fase procesal, en la que serán escuchados testigos de la defensa y la acusación.
Si por mayoría simple entre los 81 senadores se decidiera apoyar el proceso, el pleno de la Cámara Alta será convocado por la Corte Suprema para una última sesión, en la cual Rousseff sería despojada de su mandato si lo aprobase una mayoría calificada de 54 votos.
En caso contrario, Rousseff sería absuelta y debería recuperar el cargo una vez que se publique la sentencia, lo que relegaría a Temer otra vez a una vicepresidencia que sería virtualmente inviable, tras el claro distanciamiento y enemistad entre ambos. (EFE)
(Foto de cabecera: EFE)