El voto por el líder cajamarquino Gregorio Santos, procesado en prisión por supuestos delitos de corrupción, es una señal de que un sector de la ciudadanía pide un cambio de modelo, señaló la excandidata presidencial, Verónika Mendoza.
La lideresa del Frente Amplio (FA) obtuvo en primera vuelta 18,8% de votos válidos, a pocos puntos por debajo del economista de 77 años, Pedro Pablo Kuczynski (Peruanos por el Kambio), quien pasó a segunda vuelta con 21% junto a Keiko Fujimori, hija del exdictador Alberto Fujimori, quien obtuvo 39,8%.
Mendoza fue la izquierdista con mayor votación en las elecciones 2016. El otro partido que representaba a este sector político estaba liderado por Santos, un exgobernador regional de Cajamarca e investigado en prisión por supuestos delitos de corrupción. A pesar de encontrarse en la cárcel, el conocido líder de la lucha contra el proyecto minero Conga, consiguió 4% a nivel nacional.
Esos cuatro puntos, señalan diversos analistas, le hubieran servido a la excandidata del FA para superar a Kuczynski y pasar a segunda vuelta enfrentando al fujimorismo. Para Mendoza, el voto por Santos explica varias cosas.
"Es un pedido de la ciudadanía por un nuevo modelo más democrático, más descentralizado. Es una demanda por mayor presencia del Estado y una demanda de mayor reconocimiento de la diversidad cultural de nuestro país", afirmó la congresista cusqueña en declaraciones al programa televisivo Agenda Política.
La consolidada nueva lideresa de la izquierda peruana consideró que "en términos del modelo económico" PPK y Fujimori "representan lo mismo". "Sin embargo, Keiko representa lo peor de la historia reciente de nuestro país. No podemos permitir como país que invisibilicemos todo lo que representa el fujimorismo en términos de violación a los derechos humanos, compras de medios de comunicación, esterilizaciones forzadas, corrupción institucionalizada, eso para nuestro país no lo queremos nunca más", señaló.
Mendoza hizo un llamado al candidato Kuczynski para que deslinde con el fujimiorismo. "Quien ha pasado a segunda vuelta es el señor PPK, es a él a quien le corresponde deslindar con el fujimorismo", dijo en referencia al recuerdo del 2011, cuando el economista apoyó abiertamente a Fujimori y elogió al gobierno de su padre, en el que se violaron derechos humanos y es considerado como uno de los más corruptos de la historia peruana.
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