Desde joven, y gracias a un entorno familiar que no es natural de nuestra capital, Javier Torres Seoane, candidato al Congreso del Frente Amplio (FA), tuvo conciencia de la desigualdad y multiplicidad de realidades que existen en el Perú. Esta crianza no pasó por él sin tocarlo. Lo demuestra al haber escogido la antropología como carrera y el haber estado desde fines de los 80 a inicios de los 90 en el campo (en Huaura y Ocongate).
Trabajó, además, en distintas ONGs (fue presidente de Servicios Educativos Rurales y, a finales del 2007, cuando iniciaba el juicio a Alberto Fujimori, ejerció como Secretario Ejecutivo de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos). Con esa trayectoria, Torres Seoane se presenta como alguien comprometido por conseguir que el Perú sea, al fin, una nación de ciudadanos.
Como comunicador se ha dedicado a dos puntos base. Con Noticias SER, que nació a partir del conflicto de Ilave y la falta de información sobre él, trabaja para que exista una ventana que difunda el acontecer político regional, más allá del centralismo limeño. Como entrevistador y analista político, trabaja para tender los necesarios puentes entre la sociedad y la comunidad académica peruana, para abrirla y difundir sus hallazgos.
Torres Seoane postula al Congreso para Lima con el número 36 del Frente Amplio. LaMula.pe conversó con él sobre cómo esta trayectoria y estas experiencias de vida lo harían un buen congresista, cuáles son los puntos en los que enfocaría su trabajo, y por qué Verónika Mendoza es la mejor opción.
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