El nivel de desempleo entre las personas con discapacidad en América Latina es "alarmante", aseguró hoy a Efe en Montevideo la responsable de Programas de Servicios Sociales de la Organización Iberoamericana de Seguridad Social (OISS), la española Ana Mohedano.
La especialista, que participa hasta este viernes en un seminario en la capital uruguaya en el que expertos de 16 países de Iberoamérica intercambian experiencias sobre los desafíos de acceso al empleo para este tipo de personas, indicó que en algunas zonas de América Latina el desempleo en ese sector poblacional "llega hasta el 80 %".
"Son cifras realmente alarmantes, sobre todo porque el empleo no es solamente esa remuneración económica, si una persona con discapacidad no trabaja, no tiene acceso al sistema sanitario, de pensiones, servicios sociales...", subrayó Mohedano.
A pesar de indicar ese porcentaje de desempleo en algunas zonas de la región, la especialista del OISS destaca que "no existen datos sólidos en Iberoamérica sobre el empleo de personas con discapacidad".
"Hay zonas en las que ni siquiera sabemos cuántas personas con discapacidad hay. Es grave, porque si queremos construir políticas sólidas para fomentar el empleo de estas personas y no sabemos cuántas son, ni dónde están, ni qué problemas tienen, cómo vamos a diseñar esas políticas", agregó.
A pesar de ello, Mohedano afirmó que en materia de empleo y en otros campos vinculados para personas con discapacidad se están produciendo avances.
"La situación de las subregiones es muy diferente entre sí. Es cierto que el Cono Sur está avanzando muchísimo, se están haciendo proyectos muy interesantes, al nivel de los que se están haciendo en países europeos o en Estados Unidos, pero sí que hay otras regiones como Centroamérica en donde hay mucho por avanzar", apuntó.
Uno de los puntos que se aborda en este seminario de expertos y especialistas procedentes de instituciones públicas vinculadas a estos asuntos es la brecha que se produce entre las mujeres y los hombres con discapacidad en cuanto al acceso al empleo así como la que se produce con los indígenas y los residentes en zonas rurales.
En cuanto a las medidas que se intentan aplicar en la región para paliar la situación hay iniciativas como reservar porcentajes de empleo público a personas con discapacidad, bonificar cuotas a la seguridad social para aquellas empresas que las contraten, incentivos fiscales o prioridad en licitaciones públicas.
Sobre ello, Mohedano destacó que, a pesar de que es positivo que el tema esté sobre la mesa y exista la voluntad de trabajar sobre el asunto, uno de los obstáculos que se presenta es la falta de implementación real de las medidas.
En ese sentido, uno de los coordinadores generales de la Secretaría Nacional de la Personas con Discapacidad de Brasil -dependiente del Ministerio de Derechos Humanos-, Wederson Santos, explicó a Efe que en su país existe una ley de cuotas desde 1991 para empresas privadas, pero solo un 39 % de las mismas la cumplen.
Esa situación de incumplimiento de cuotas también se produce en México, donde el 3 % de las vacantes en las dependencias y entidades de la administración pública federal -en un rango menor están la municipal y la estatal- deben destinarse a personas con discapacidad.
El subsecretario de Previsión Social de la Secretaría de Trabajo de México -equivalente a un Ministerio-, Ignacio Rubí, explicó a Efe que el Gobierno está buscando cambiar esa situación y subrayó que se han producido avances significativos, por ejemplo, en el aumento del porcentaje de mujeres con discapacidad que acceden al empleo. EFE
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