América Latina y el Caribe se volverá a contraer este año según el Fondo Monetario Internacional (FMI). Si bien en octubre pasado avizoraba un crecimiento de 0.8% ahora afirma que se contraerá 0.3% este año. El repunte llegaría recién en el 2017, con una expansión de 1.6%, menor al 2.3% que estimaba en su último informe.

La razón de esta caída, según el organismo, sería la recesión en Brasil. Y es que el gigante sudamericano caerá 3.5%, según los pronósticos, luego de una baja del 3.8% en 2015. Ni siquiera el alza del 2,6% proyectado para México –que en 2017 crecerá un 2,9%–, otro gran mercado del continente, logrará compensar la crisis económica y política que sufre el gobierno de Dilma Rousseff. 

"La proyección actual apunta a que el PBI agregado de América Latina y el Caribe se contraerá también en el 2016, aunque a una tasa más baja que en el 2015, a pesar del crecimiento positivo en la mayoría de los países de la región. Esto refleja la recesión de Brasil y otros países en dificultades económicas", alertó el FMI. 

Sin mencionar cuáles serán las otras naciones que estarán en problemas, se descuenta que una de ellas es Venezuela, ya que el lunes el jefe del departamento para América Latina del FMI, Alejandro Werner, advirtió que la situación económica en el país caribeño se empeorará tanto que la inflación podría alcanzar en el 2016 el 500%.


Estados Unidos y Europa

A diferencia de las economías emergentes, los países avanzados experimentarán un crecimiento más estable. Según el FMI, la expansión de este grupo aumentará en 0.2 punto porcentual en el 2016, a 2.1%, y se mantendría sin cambios el próximo año.

Estados Unidos crecería 2.6% este año y el próximo, en lugar del 2.8% que esperaba en octubre. La actividad de la mayor economía mundial mantiene su impulso “gracias a condiciones financieras que aún son favorables y al fortalecimiento del mercado de la vivienda y del trabajo”.

En la zona euro, “el fortalecimiento del consumo privado -estimulado por el abaratamiento del petróleo y las condiciones financieras favorables- está compensando el debilitamiento de las exportaciones netas”. La región crecería 1,7% en 2016 y 2017. 

El FMI espera además que el crecimiento de Japón se afiance en 2016 gracias al respaldo fiscal, la caída de los precios del petróleo, condiciones financieras expansivas y el aumento de los ingresos.


Riesgos 

Uno de los principales riesgos a la baja para el pronóstico de crecimiento global es una desaceleración más marcada de lo esperado en China (hoy se informó que creció 6.9% en el 20156, confirmando su enfriamiento), “con mayores efectos de contagio internacionales por la vía del comercio, los precios de las materias primas y la confianza, y los efectos consecuentes en los mercados financieros internacionales y las valoraciones de las monedas”, planteó el informe.