El crecimiento económico de China en el 2015 fue de 6.9%, informó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) en Pekín. El gobierno de ese país se había fijado como meta alcanzar un 7%.

Las cifras divulgadas confirman el gradual enfriamiento de la economía, que creció a un ritmo anualizado del 6.8% en el cuarto trimestre del año pasado (tras un 7% en los dos primeros y un 6.9% en el tercero) y anticipan nuevas medidas monetarias de reactivación.

A pesar de la desaceleración del crecimiento, el sector de servicios contribuyó por primera vez con más de la mitad (50.5%) al PBI chino (un 48.1% en el 2014), lo que la Oficina de Estadísticas interpretó como un éxito de la restructuración económica del país. 

En tanto, el crecimiento de la producción industrial cayó de 8.3% en el 2014 a un 6.1% en el 2015. En diciembre, el crecimiento fue sólo de un 5.9%.

Aunque el gobierno en Pekín quería que la economía china se sustentara más en el consumo doméstico, el aumento de la cifra de ventas del comercio al por mayor bajó de 12% en el 2014 a 10,7% en el 2015. También se debilitaron notablemente el mercado inmobiliario y las inversiones en activos fijos.

Cabe indicar que no obstante el crecimiento más lento y de las turbulencias en los mercados de valores de China, el gobierno en Pekín asegura que a largo plazo los fundamentos de la economía china son sostenibles.

En la "nueva normalidad" se modera el crecimiento. La economía debe apoyarse más en el consumo interno, en el sector servicios y en la innovación, dijo el presidente Xi Jinping . El crecimiento debe ser "estabilizado" a corto plazo, y es necesario planear y coordinar entre las diferentes regiones el desarrollo a largo plazo, subrayó el jefe de Estado.

Los expertos esperan para este año una nueva desaceleración como consecuencia de una deuda cada vez mayor debido a una reducción de las exportaciones, una burbuja inmobiliaria y la baja de inversiones, entre otros puntos. El Banco Mundial prevé para el 2016 un crecimiento de 6.7%. 

El nuevo plan quinquenal, aprobado por el Congreso del Pueblo en marzo del 2015, establece como meta un crecimiento medio anual de un 6.5% en los próximos cinco años. Sin embargo, muchos analistas dudan de las cifras oficiales y reducen el crecimiento económico real a entre un 4 y 6% anual.

Los resultados influyeron favorablemente en la Bolsa de Shanghai que concluyo su sesión con ganancias de 3.2%.


(Foto: globalasia.com)