Hace cuatro años, cuando protagonizó su primera portada en la revista estadounidense Glamour, Jennifer Lawrence estaba a punto de convertirse en una superestrella gracias a su papel como Katniss en The Hunger Games. Poco después se haría merecedora del Oscar a la Mejor actriz por su trabajo en Silver Linings Playbook y entraría a formar parte de otra franquicia en el papel de Mystique, en X-Men.

Ahora, tras terminar de filmar su última película como la mutante Mystique y habiendo cerrado definitivamente la promoción de su última entrega como Katniss, Lawrence está determinada a dedicarse exclusivamente a películas chicas. Por ejemplo, se acaba de estrenar en Estados Unidos su tercera y más reciente colaboración con el director David O. Russel, Joy.

Además, ha anunciado sus intenciones de dirigir una película basada en el artículo 'Operation Delirium', sobre experimentos con armas químicas durante la guerra fría. Quizá su anuncio más sonado y que promete el mayor éxito comercial es la película que ha escrito y va a realizar con la comediante Amy Schumer.

Ayer, Glamour publicó su tercera portada con Jennifer Lawrence, que viene acompañada de una entrevista en la que la chica de Kentucky demuestra no solo lo bien que se ha adaptado al estilo de vida de Hollywood, sino además y sobre todo cómo el gusto por su trabajo -y la habilidad única que tiene para hacerlo- no está entre las cosas que ha sacrificado para adaptarse.

Estos son algunos extractos traducidos de la entrevista con Cindi Leive, la editora general de Glamour, que puedes leer completa en este enlace.

Sobre su vida como estrella de cine

Es muy bonita. Muy linda… Me tomó unos años acostumbrarme. No me daba cuenta de lo molesta y distorsionada que me sentí. Durante más o menos tres años completos. No tenía nada que ver con The Hunger Games… Tenía que ver con lo que venía con The Hunger Games. Seguía sintiendo que tenía derecho a cierto tipo de vida que ya no se me permitía tener. Sentía que tenía el derecho a decir ‘no quiero que me fotografíen ahora, no quiero gente fuera de mi casa ahora, no quiero que mis sobrinos estén en la revista People’. Sentía mucha ira y me preguntaba ‘¿por qué no puedo sencillamente hacer mi trabajo?’ Y entonces solo te acostumbras… y solo es.

Sobre la pasión que siente por su trabajo

Soy adicta al trabajo y a la actuación. No sé cómo describirlo. Leer un guion es como un mapa. Pero es en el set, encontrar al personaje, encontrar las emociones, tener esa adrenalina… es como un ímpetu. Desarrollar un personaje es la única cosa en el mundo en la que me siento 100% confiada, que entiendo. Sigo teniendo el sentimiento de cuando era adolescente: ‘Soy buena en esto, y me gusta’. Así que lo quiero seguir haciendo, porque me hace sentir bien conmigo misma.

Sobre su última película, Joy

Son las cuatro estaciones del éxito: antes, cuando no crees en ti misma; cuando ya crees en ti, pero nadie más lo hace; y luego todas las cosas horribles que vienen después. Y me gustaba el principio, cuando quiere algo más de lo que la vida le ha dado. Tiene esta frustración que no es muy amigable, estando echada al lado de sus hijos y decir ‘siento que estoy en una prisión’. Pero es verdad. Todo el mundo tiene esta idea: tienes hijos y toda tu vida parecerá completa. ...

Pero puedes tener hijos y amarlos con todo tu corazón y tu alma y amar a tu familia, y sigue estando bien tener un fuego dentro tuyo. Eso no tiene nada que ver con tu familia. Tiene que ver contigo. Ella tiene un don… y no puede mandarlo a callar.

Sobre las probabilidades que tenía de convertirse en quien es

Crecí en Kentucky, así que nadie me decía “vas a ser una estrella de cine”. Simplemente no era una posibilidad. Y luego, cuando les dije a mis padres, cuando tenía 14 años, que quería mudarme a Nueva York y convertirme en actriz, ellos dijeron “bueno, no. Obviamente”. Yo seguí insistiendo. Ya había ahorrado dinero como niñera. Así que dije ‘me voy’.

Sobre su estilo

‘Lesbiana empoderada promiscua’. Eso es literalmente lo que le digo al estilista. No sé si eso es ofensivo…

Glamour: Pero eso me hace pensar en ti en un esmoquin, que no parece ser tu estilo.

Bueno, antes que todo, Dior es una casa que es muy femenina y hermosa; durante este último tour de prensa cada vestido era fenomenal. Así que no me ves como lesbiana empoderada promiscua en la alfombra roja porque estoy siendo la mujer Dior, lo que es un honor. Pero también tengo tetas y poto. Y hay cosas que están hechas para gente flaca, como las cosas que tienen muchos encajes o cubren mucho; esas cosas me hacen ver gorda. Tengo que mostrar los bultos. Si tienes tetas, tienes que mostrarlas como diciendo ‘estas son tetas. No es celulitis”. Tampoco hay nada de malo con eso.

Sobre protagonizar The Hunger Games, la primera franquicia exitosa liderada por una mujer

Rompimos ese récord y ni siquiera me di cuenta. Como mujeres no sabemos que estamos en déficit por tener vaginas. No fue hasta leer un titular del tipo ‘¡aunque es mujer!’ que me di cuenta que tenía que estar pendiente de eso. ‘¿Cómo lidió esta pequeña vagina con eso? Cargando con tooooda una peícula’. ‘¿Cómo lo hice, menstruando una vez al mes?’.

Sobre el dilema de hacer públicas sus opiniones

Siempre cambio de idea sobre expresar mis opiniones. Estoy de acuerdo con los actores que dicen que quienes actúan se deberían quedar fuera de la política. No somos políticos. Y mi negocio se basa en que todo el mundo compre entradas y vea mi película… No es inteligente, desde el punto de vista empresarial, tener opiniones. ¿Pero cuál es el punto de tener una voz si no la voy a usar para aquello en lo que realmente creo?

Sobre sus denuncias contra las fotos hackeadas de 2014

Si me hubiese quedado callada, habría parecido que estaba asustada. Y no estaba asustada, estaba furiosa. Nunca he sentido que ‘aprendí una lección’. ¡Yo no hice nada mal! [Pero] incluso yo me he defendido diciendo que estaba en una relación con un hombre maravilloso por cinco años. Pero incluso si no lo estuviese, incluso si solo hubiese salido una vez con un chico… no importa cuál es la situación. Es tu cuerpo. Puedes hacer lo que quieras.

Sobre su incapacidad para evitar convertirse en un GIF

No siento que son incomprendida. Siento que me prestan demasiada atención. No estoy intentando ser un GIF. No estoy tratando de decir una frase ideal para Twitter. Lo único que intento hacer es actuar. Y tengo que promocionar estas películas. Y, al final del día, supongo que soy una maldita loca. Así que si grabas lo que digo, va a ser raro. ¿Qué voy a hacer? Soy solo una chica, sentada frente al mundo y pidiéndole que la disculpe por hablar.


Notas relacionadas en lamula.pe:

Jennifer Lawrence ya no quiere caer bien

Jennifer Lawrence deja X-Men

Jennifer Lawrence finalmente recibe igualdad de pago en Hollywood

J.Law, una amiga platónica