El índice general de la Bolsa de Shanghai, el principal indicador de los mercados de China, cerró hoy con ganancias de 2.25%, con lo que terminó de recuperarse de su desplome de 6.85% del lunes pasado. Empezó la sesión con ganancias y así se mantuvo hasta el cierre. 

En el otro mercado de valores del país, la Bolsa de Shenzhen, el principal indicador local, concluyó también el día con ganancias muy similares, de 2.24%, aunque por momentos tuvo pérdidas. 

A estos buenos resultados parece haber contribuido la inyección de capital de 130,000 millones de yuanes (19,840 millones de dólares) que hizo ayer el Banco Popular de China (central) en el sistema financiero nacional, la mayor desde setiembre, para aliviar los problemas de liquidez en su economía. 

Asimismo, la jornada estuvo centrada por la expectativa de que se amplíe la prohibición a la venta de títulos por parte de los grandes accionistas de las compañías que cotizan en bolsa, una medida que expira este mismo viernes y con la que se liberarían US$185,000 millones.

No obstante los avances se dan en medio de nuevas caídas del yuan y de nuevos síntomas de ralentización en la economía china. Además del sector manufacturas, el sector servicios también tuvo un bajón en diciembre, cerca de la contracción. El Índice de Gerentes de Compra (PMI) del sector de servicios cayó a 50.2 desde los 51.2 puntos de noviembre. La cifra es la más baja desde julio del 2014 y la segunda más débil desde que se comenzó a recopilar los datos a finales del 2005.


Efecto bursátil

Este escenario afectó negativamente a la Bolsa de Tokio, que cerró con una caída de 1%. En tanto, a media jornada, las bolsas europeas muestran resultados mixtos: Francfort y Madrid pierden 1.80% y 1.45%, respectivamente; Londres y París avanzan 0.72% y 0.34%.


(Foto: EFE)