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Publicado: 2015-11-30
El integrante del colectivo "Merecemos Más", Julio Arbizu, se pronunció sobre la reciente ratificación de la constitucionalidad de la Ley Universitaria, así como a los intentos frustrados para que no se aplique. Sin embargo, alertó que los partidos que lideran las encuestas tienen la intención de derogarla si llegan al poder, por lo que hizo un llamado a la ciudadanía a elegir bien en abril del próximo año.
- El Tribunal Constitucional TC ha convalidado hace unos días la Ley Universitaria. ¿Qué piensa de este avance en lo legal?
- Nos parece positivo, porque si bien creemos que esta Ley tiene algunas imperfecciones o materias en las que puede mejorar, es una apuesta por la reforma de la educación superior, que padece, sino la peor de sus crisis, una muy intensa.
- ¿Por qué se ha generado esta crisis?
- Se ha generado a partir de la apropiación de los espacios públicos de las universidades, y esto tiene que cambiar. La ley apuesta por este cambio, pero algunos se resisten a su cumplimiento porque quieren el mantenimiento del statu quo actual, que les beneficia y les permite seguir lucrando y pensar la educación superior en términos de negocios.
- Usted dice que la Ley tiene que mejorar. ¿En qué cosas habría que hacerlo?
- Hay que incidir con mucha más intensidad en convertir las universidades en centros de investigación que en un lugar para impartir conocimientos. Que sean espacios académicos de producción. Y en las universidades privadas, hay que desterrar la idea de universidad-negocio, que pretende convertir la educación en un objeto de intercambio. De esa manera, la educación deja de ser un servicio y un derecho fundamental que brinda el Estado, para convertirse en una mercancía y una forma de ganar dinero. No se trata de que las universidades privadas no puedan cobrar si hay un servicio adecuado, pero dejar que sean empresas es absolutamente pernicioso.
- Se acaba de poner fin a la "Ley Cotillo" y a otros proyectos similares en el Congreso. ¿Fueron manotazos de ahogado?
- En efecto, porque se han dado cuenta que su prédica en favor de la conservación del statu quo no es popular, y no ha calado en la comunidad universitario. Pensaron que su discurso, con los medios que tienen a su disposición, podía contrariar la disposición de la gente a mejorar el sistema universitario, y fracasaron. Han estado jugando a preservar a los rectores donde han sido históricamente sus feudos. Esto ha sido un paso inexorable hacia una reforma.
- Sin embargo, estos partidos encabezan las encuestas de cara a las elecciones del próximo año. Si alguno de estos gana la presidencia, ¿no corre peligro la Ley Universitaria?
- Efectivamente, la Ley corre peligro ante un escenario de victoria de alguna de estas agrupaciones políticas que se han mostrado rebeldes frente al cumplimiento de una norma que ha sido convalidada por el TC. Esto debe alertar no solo a la comunidad universitaria, sino al ciudadano en general que espera una mejora del sistema de educación superior, para que sepa por quién votar. Hay que recordar que el Apra y el fujimorismo han anunciado, a través de sus más prominentes representantes, que derogarán esta ley, que combate a un sistema que favorece la corrupción, el oscurantismo, la escasez de investigación, la preservación de las universidades empresas y la proliferación de universidades de pacotilla que funcionan en segundos pisos de chifas, que han sido como en los 90 fueron las combis en el transporte público. Ya sabemos qué es lo que ha pasado con las combis.
- Ante ese escenario, ¿qué candidaturas podrían hacer frente a esto?
Ojalá se pueda conformar una coalición entre el Frente Amplio y Unidad Democrática (que realizó sus internas ayer), en la que pueda haber una candidatura única de la izquierda y los espacios progresistas, para oponerse seriamente a estos grupos.
Foto de cabecera: Andina.
