La Comisión de Educación archivó, por unanimidad, todos los proyectos contrarios a la Ley Unversitaria, tras el fuerte rechazo popular y la reciente movilización de los estudiantes universitarios que obligó a un importante sector del Congreso a retroceder en su intención de aprobar la llamada 'Ley Cotillo', que impulsaban apristas y fujimoristas.
En total, fueron 4 proyectos -incluida la Ley Cotillo- los que se enviaron al archivo definitivo y que pretendían modificar la Ley Universitaria (Ley 30220), cuyo objetivo era que varios rectores permanezcan en sus cargos, contraviniendo lo que estipuló la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (Sunedu).
La Sunedu -sí, a la que Alan García se quiere 'tumbar' si vuelve a Palacio- fijó como plazo diciembre de este año para la elección de los nuevos rectores, mediante el mecanismo del sufragio universal de docentes y estudiantes.
Antes de debate en la comisión, congresistas de Fuerza Popular y el Apra, los principales impulsores de estas inciativas, anunciaron que votarían para archivarlas, no por convicción sino por presión.
El presidente de Comisión de Educación, Daniel Mora Zevallos, dijo que lo que quería un sector del congresistas era postergar las reformas de la Ley Universitaria, a fin de favorecer a varias universidades privadas.
"Acá (con la reforma) lo que se busca es que no estafen a los universitarios, que se les dé el servicio por el que pagan (...) Es un servicio público esencial, eso es lo que no le gusta a algunos", dijo en Canal N.
La historia de la 'Ley Cotillo' empezó el pasado 21 de octubre, cuando un grupo de congresistas, apristas en su mayoría, firmaron el proyecto de Ley 4915, que pretendía que las autoridades universitarias elegidas antes de la entrada en vigencia de la Ley Universitaria sigan en sus respectivos cargos.
La Junta de Portavoces del Congreso acordó debatir esta iniciativa de frente en el Pleno, sin que el proyecto pase por un análisis previo en la Comisión de Educación, como correspondía.
Pero la resistencia ciudadana que generó la pretensión de aprobar al 'caballazo' la 'Ley Cotillo' fue tal, que sus promotores se vieron obligados a retroceder.
La iniciativa, ya herida de muerte, volvió al grupo de trabajo que preside Mora, y ahí se archivó de forma definitiva, al igual que otros tres proyectos que contravenían la Ley Universitaria, como el que se presentó el 26 de enero de este año por parlamentarios de distintas bancadas.
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