Tras ser arrestados con 800 kilos de cocaína, Efraín Antonio Campo Flores (29 años) y Francisco Flores de Freitas (30 años), parientes del presidente del Venezuela, Nicolás Maduro, la Justicia estadounidense les juzgará por narcotráfico y podrían recibir cadena perpetua.
"La pena en el escrito de imputación conlleva como máximo una condena de cadena perpetua", informó hoy en un comunicado el fiscal del caso, Preet Bharara, sobre lo previsto en el Código Penal aprobado por el Congreso estadounidense.
Campo Flores, ahijado del mandatario venezolano, y Flores de Freitas, su sobrino, fueron imputados por conspirar para introducir cocaína en EEUU. Ambos participaron en varios encuentros durante el mes de octubre para organizar el envío de un cargamento de cinco kilos de cocaína a través de Honduras, informó la DEA.
Luego de ser detenidos esta semana en Puerto Príncipe (Haití) y entregados a las autoridades estadounidenses, está previsto que comparezcan por primera vez en el juzgado federal de Manhattan, informó la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York.
Flores y Campos portaban pasaportes diplomáticos expedidos por Venezuela en el momento de su detención. Ambos invocaron en un primer momento inmunidad diplomática. Además, se conoció que eran objeto de seguimiento desde hace ocho meses por parte de la DEA.
El Gobierno de Venezuela aún no reacciona de manera oficial ante el hecho. Maduro, quien está de gira por Asia y Europa, se limitó a hacer una velada referencia al hecho en su cuenta en Twitter: “La Patria seguirá su camino, ni ataques, ni emboscadas imperiales, podrán con el Pueblo de los Libertadores; tenemos un solo destino: vencer”.
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