La empresa Repsol aseguró este lunes que "desconoce el fundamento" de las informaciones que señalan que están por cerrar la venta de sus grifos y la refinería La Pampilla que tiene en Perú, en una operación que ascendería a 350 millones de euros.
La firma española envió una comunicación a la Supeintendencia del Mercado de Valores:
El diario especializado Expansión, que cita fuentes sector de hidrocarburos, informó que el traspaso de los activos de Repsol podría concretarse en breve, ya que las negociaciones para ello estaban en la fase final.
El medio agregó que esta operación es parte del nuevo plan estratégico del grupo español, el cual contempla desinversiones de activos por un valor de 6,200 millones de euros hasta el 2020.
Repsol está presente en el Perú en el negocio de upstream (exploración y producción) en gas licuado de petróleo (GLP), a través del cual abastece, desde el yacimiento de hidrocarburos de Camisea, a más de un tercio del mercado peruano.
También está en el negocio downstream (comercialización y refino), con una red de 374 estaciones de servicios y con la refinería de La Pampilla, cuyos activos (de los que posee un 51.03%) van a ser traspasados en la citada operación.
En 2013, el gobierno del presidente Ollanta Humala quiso comprar toda la operación de la empresa española en el país, pero desistió. Al parecer, pesó la oposición del entonces ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, quien coincidía con diversos expertos que señalaban de que sería un mal negocio para el Estado y que afectaría la confianza de los inversionistas.
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