Como parte de un proyecto de reforma educativa promovido por el gobierno de Japón, se pretende reducir, en distintas universidades públicas niponas, el campo de acción de las facultades de humanidades.
De las 60 universidades que allí ofrecen este tipo de carreras, 26 ya han confirmado que cerrarán o reducirán las facultades tras la petición gubernamental de reforma, según datos recabados en una encuesta realizada por el periódico Yomiuri Shimbun.
Asimismo, 17 universidades públicas han decidido restringir el reclutamiento de los estudiantes a las humanidades y a los cursos de ciencias sociales -incluyendo Derecho y Economía-, según el mismo sondeo reportado por el blog Social Science Space.
Razones utilitarias
El ministro de Educación, Hakuban Shimomura, envió una carta a las 86 universidades públicas, con el motivo de hacer un llamado para que estas instituciones "tomen medidas activas para abolir [ciencias sociales y humanidades] organizaciones o para convertirlas en áreas que correspondan mejor con las necesidades de la sociedad", según informó Higher Times Education.
Sobre el mismo asunto, el Presidente de la Universidad de Shiga, Takamitsu Sawa, ha criticado esta forma de desdén, recubierto de utilitarismo, hacia las carreras profesionales vinculadas a las humanitas.
"La mala tradición de evaluar el aprendizaje académico y la ciencia según su utilidad, con empresas del sector privado metiéndose en la educación superior, aún vive en Japón", sostiene Sawa en un artículo publicado en Japan Times.
Por su parte, universidades de Tokyo y Kyoto, ya han informado que no cumplirán con el pedido del Ejecutivo japonés. El Consejo de Ciencia de Japón ha mostrado también su preocupación, por medio de un comunicado, ante estas medidas que pueden tener un "grave impacto" en el futuro de las carreras cuestionadas.
(Foto de cabecera: Alain Buu /Gamma-Raph/Getty Images)
Notas relacionadas:
El difícil paso del profesor de humanidades
Las humanidades son necesarias para mantener viva la democracia
