Un artículo de la revista brasileña Veja, compara la trama de la famosa serie estadounidense 'Narcos' con una supuesta red de crimen organizado encabezada por los más altos niveles del Estado boliviano: el presidente Evo Morales y su segundo al mando, Álvaro García Linera. 

Su más importante fuente es un ex integrante del polémico Cartel de Medellín liderado por el popular Pablo Escobar. Y es que Carlos Toro fue muchos años un informante de la DEA dentro de la organización criminal. 

Toro ha declarado a la revista y ha afirmado que sus investigaciones dentro de la poderosa agencia antidrogas, involucran al presidente, a varios militares con cargos altos y a algunas autoridades policiales del país. 

La información pudo ser revelada puesto que el ex informante rompió relaciones con la DEA y le inició un juicio en el que reclama nada menos que cinco millones de dólares como indemnización. 

Además dijo que la agencia tiene las pruebas necesarias para entablar una demanda al piloto del avión presidencial, el general Wálter Álvarez Agramonte, al agente de inteligencia al servicio de la presidencia, Yidua Torres, al amigo de Álvaro García Linera, Faustino Giménez y a Raúl García, padre de García Linera fallecido en el 2011. 

Cabe resaltar que ya desde el 2012 se hicieron públicas algunas denuncias que vinculaban a Raúl García con el narcotráfico. En ellas se le acusó de haber recibido un departamento a cambio de utilizar su influencia para asignar un cargo a un corrupto en la jefatura de aduana en el aeropuerto Viru Viru, donde cargaban toneladas de cocaína para llevarlas a Brasil.

Al mismo tiempo se difundió un informe acerca de los servicios de inteligencia de Bolivia que afirmaban que el ministro, Juan Ramón Quintana habría visitado la residencia de un traficante brasileño durante el 2010. Se le vio saliendo del domicilio con dos maletas, presuntamente llenas de dinero. 

Sin embargo, la prueba más reciente de la vinculación del Gobierno boliviano con el narcotráfico se dio en abril del presente año cuando el coronel Germán Cardona se fugó a España luego de denunciar la existencia de vuelos militares que transportaban cocaína a Venezuela. Es más, acusó al mismo presidente de supervisar en persona algunos de los viajes. 

Tiempo después Cardona volvió a Bolivia y se desmintió . Esto lo hizo, al parecer por miedo puesto que un día antes había aparecido asesinada la madre del periodista boliviano que publicó los primeros artículos con sus denuncias.

(Foto de cabecera: librered.net)