La campeona de la liga UFC, Ronda Rousey, se mostró totalmente fastidiada, y con argumentos, ante la decisión de la Comisión Atlética de Nevada (NSAC, por sus siglas en inglés) de suspender al peleador, Nick Diaz -amigo cercano de Rousey-, durante cinco años por dar positivo en una prueba de antidoping por marihuana (es la tercera vez).  

El miércoles de la semana pasada, en una conferencia de prensa de la UFC, en Melbourne, Australia, dijo lo siguiente, según informó Complex, cuando le consultaron sobre la situación de Diaz:

"Estoy totalmente en contra de hacer test por marihuana. No es una droga que mejore el rendimiento. Y no tiene nada que ver con la competencia. Solo es testeada por razones políticas".

Asimismo, la atleta y campeona, de quien uno podría esperar una opinión más reservada en torno al tema, consideró que la prueba por marihuana es una invasión a la privacidad.

A pesar del apoyo y simpatía que se ganó por sus declaraciones, a nivel mundial -la noticia ha sido viralizada por medios de noticias del mundo-, y por su enérgica posición, el editor de deportes de The Huffington Post, Justin Block, puso en una 'balanza' la posición de Rousey al respecto

-> Según un portavoz de la Agencia Mundial de Anti-Doping (WADA, por sus siglas en inglés), la marihuana sí puede ofrecer algunas mejoras en la performance: "mejor foco" y "reducción de estrés".

-> Por otro lado, según la norma de la NSAC se sugiere que una suspensión de tres años corresponde a un tercer resultado positivo en marihuana. A pesar de ello, la organización de Nevada pidió una suspensión de por vida a Diaz. Y ahora le han dado cinco años.

Para Rousey, esta medida contra su amigo y colega es injusta, y su posición desafiante sobre el tema deja entrever también el fastidio de una deportista de alto rendimiento ante una comisión que no procede de acuerdo a sus propias normas.



(Foto de cabecera: Getty Images)


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