El río Táchira es la vía que usan miles de colombianos para dejar Venezuela, a pie y con las pocas cosas que pudieron rescatar, luego de que el presidente de ese país, Nicolás Maduro, tomara la polémica decisión de cerrar de forma indefinida la frontera con Colombia. 

Cargados con colchones, televisores, refrigeradores y hasta mascotas, el vía crucis que tienen que atravesar los colombianos para llegar a la ciudad de Cúcuta se ve interminable y casi imposible de lograr.

Son cientos de familias que fueron obligadas a dejar sus hogares por las fuerzas policiales venezolanas, tras la orden de Maduro, quien alegó motivos de seguridad. 

Según Jaime Barrera Hoyos, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, 1,600 personas, que representan más de 400 familias, atraviesan todos los días el río fronterizo.

¿Por qué abandonan sus hogares?

El alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez-Paris Lobo, dice que las personas salen de manera voluntaria para que no las registren y así puedan volver en algún momento a Venezuela. 

Sin embargo, al parecer no todos piensan así. 

Muchas venezolanos cruzan por miedo a los supuestos atropellos por parte de las autoridades venezolanas. Algunos afirman que los dejan quedarse pero destruyen sus casas y sus cosas. 

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, exigió que Venezuela respete los derechos de los colombianos que habitan en sus zonas de frontera.

Refugios al tope

Los colombianos que cruzan el río son ayudados por la Policía, que puso a disposición de los afectados 20 camiones para cargar sus pertenencias en los lugares más intransitables de la trocha hacia el Táchira.

Sin embargo, a pesar de que muchos de los que atraviesan la frontera tienen familiares que los pueden acoger en suelo colombiano, también hay una gran cantidad no cuenta con apoyo en Cúcuta.

Es así que los cinco albergues destinados para atenderlos se han visto colapsados.

(Foto de cabecera: AFP)