La autoproclamada precandidatura presidencial de Daniel Urresti para representar al nacionalismo en las elecciones de 2016 parece tener más de un detractor en las filas de su propio partido. Y es que a las críticas de la congresista y exjefa del gabinete Ana Jara se suman las de la vicepresidenta de la República, Marisol Espinoza.

Al ser consultada por la prensa extranjera sobre el próximo proceso electoral en nuestro país, la también legisladora afirmó que es importante que los partidos "cuenten con candidatos con credenciales democráticas, que no tengan ningún cuestionamiento, sobre todo con temas vinculados a la defensa de derechos humanos". 

Estas declaraciones de Espinoza hacen alusión al proceso que afronta actualmente Daniel Urresti por la muerte del periodista Hugo Bustíos, asesinado en 1988 en una base del Ejército en Ayacucho, cuando el exministro del Interior se desempeñaba como jefe militar de la zona.

Pero lo cierto es que Urresti parece tener una coraza para todo tipo de crítica y cuestionamiento a sus pretensiones electorales. Y él ni se inmuta ante estas, quizá porque se siente protegido y tiene la venia de los 'dueños' del proyecto nacionalista.

DESCARTA POSTULAR POR EL OFICIALISMO
En otro momento, la legisladora volvió a descartar que vaya a ser candidata a la Presidencia de la República por Gana Perú. Aseguró que su labor como vicepresidenta será la de garantizar la transición democrática.

Asimismo, informó que todavía no se ha fijado la fecha del congreso partidario para elegir al candidato presidencial del nacionalismo para los comicios del 2016 y que hasta ahora solo hay precandidatos lanzados por iniciativa propia, entre los que figuran Urresti Elera y Jara Velásquez.

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Con información de EFE