A estas alturas, ya nadie duda de la capacidad del gobierno de Ollanta Humala de dispararse a los pies. De otra forma no se entiende que se prohíba a la procuradora de Lavado de Activos, Julia Príncipe, declarar sobre sobre las investigaciones que realiza a las cuentas de la primera dama Nadine Heredia y su hermano Ilan Heredia.
Así lo creen incluso personas que eran cercanas al nacionalismo, como el ex exprocurador Anticorrupción Julio Arbizu, quien consideró una torpeza que el Consejo de Defensa Jurídica del Estado, que depende del Ministerio de Justicia, disponga ese tipo de medidas, justo cuando hay una serie de denuncias serias contra la esposa del presidente de la República.
Incluso dijo en Ideeleradio que si bien hay un reglamento que fija algunos parámetros, a él nunca le nunca le prohibieron hablar sobre los casos que investigaba cuando estaba al frente de la Procuraduría Anticorrupción:
"Si bien es cierto hay un reglamento que lo requiere, nunca se usó de la manera en que se pretende usar ahora. Lo he dicho varias veces es una torpeza de quienes están detrás de esta disposición".
Por ello, Arbizu consideró que el mismo Gobierno está contribuyendo a que aumenten las dudas y sospechas en torno a las cuentas de Nadine Heredia:
"Probablemente, hay algo que (el Gobierno) no quiere que se sepa. Pero aun así, creo que hay una sobredimensión del caso Nadine, no tengo duda, no se acerca al nivel de corrupción de los 90 ni a las imputaciones del señor (Alan) García por más que haya intentado, al igual que Nadine, eludir las investigaciones todo el tiempo”.
El fiscal de la Nación, Pablo Sánchez Velarde, también fue consultado por la disposición del Ministerio de Justicia, que fue entendida como una mordaza contra la procuradora Príncipe, y recordó que en el caso de los fiscales, estos pueden hacer declaraciones genéricas o globales que no afecten la reserva de las investigaciones:
"Las posiciones son distintas, porque la Procuraduría es parte de un proceso judicial y quizás tengan más libertad de expresión pública a diferencia de los fiscales, que son los que dirigen la investigación y están sujetos a ciertas reglas de la investigación como, por ejemplo, la reserva de la investigación".
