Gloria Cano, abogada de la parte civil en el caso Chavín de Huántar contra el Estado peruano en la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), precisó que el fallo del tribunal supranacional no involucra a los comandos que participaron en el operativo que puso fin al cautiverio de 72 rehenes que estuvieron en manos de miembros del MRTA por 126 días en la residencia del embajador de Japón en Lima.
"(La Corte IDH) no juzga a personas sino a Estados. Lo que ordena es que el Estado peruano tiene que iniciar una investigación para determinar cómo falleció Eduardo Cruz Sánchez".
Cano resaltó también otro punto del fallo que echa por tierra las falacias que los voceros del Gobierno señalaban como una letanía, en el sentido de que el caso en el sistema interamericano de justicia ponía en entredicho la operación militar y la intervención de los comandos:
"La Corte reconoce la legitimidad del operativo, coincide con nosotros en eso pero muy aparte señala que debía de haberse respetado el derecho a la vida de las personas que habían sido detenidas, en este caso de Eduardo Cruz Sánchez y lo señala con total claridad ('Tito')".
La abogada de la Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH) señaló en canal N que ahora el Ministerio Público deberá investigar qué pasó con 'Tito':
"Lo que se sabe hasta ahora es que dos policías lo detuvieron cuando trataba de escapar de la residencia del embajador de Japón y fue entregado a otra persona. Qué fue lo que pasó a partir de ahí es algo a lo que la fiscalía tendrá que abocarse".
Cano indicó además que la Corte no encontró suficiente evidencia de la supuesta ejecución de los emerretistas Herma Meléndez Cueva y Víctor Peceros Pedraza, pero resaltó la "falta de diligencia del Estado peruano" para aclarar la situación.
Mala defensa
La abogada sostuvo que la estrategia de defensa del Estado peruano estuvo errada en este caso:
"Estado peruano ha presentado una serie de argumentos incoherentes (ante la Corte), han gastado una cantidad enorme de dinero en pagar a médicos y antropólogos, cuando sabían perfectamente que Eduardo Cruz Sánchez fue ejecutado, pero ellos quisieron negar esa verdad que estaba más clara que la luz del día".
De hecho, en el caso de 'Tito', hay dos fallos del Poder Judicial peruano que señalan que el emerretista fue ejecutado luego de ser capturado con vida. También está probado que las muertes de los subversivos ocurrieron en los momentos posteriores a la operación Chavín de Huántar.
Las evidencias apuntan a que las ejecuciones fueron perpetradas por agentes del Servicio de Inteligencia Nacional de Vladimiro Montesinos –los llamados 'gallinazos'-, al mando del Coronel PNP Jesús Zamudio, prófugo de la justicia peruana. Estos elementos que eran ajenos a la intervención militar.
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