Rusia estaría dispuesta a considerar la posibilidad de ayuda financiera a Grecia. Lo dijo hoy el viceprimer ministro ruso antes de las conversaciones entre Alexis Tsipras y Vladimir Putin. Finalmente, en contra de todas las apuestas, el Kremlin informó que los dos mandatarios no hablaron del apoyo económico en su reunión.  

Tsipras llegó a San Petersburgo para participar en el Foro Económico Internacional, la conferencia anual de negocios más grande de Rusia, donde hoy se reunió con Putin. Mientras su país volvía a encallarse en las negociaciones con los acreedores en el Eurogrupo de Luxemburgo, el líder griego declaraba "estoy en Rusia porque Europa ya no es el centro del mundo, hay nuevas fuerzas".

La nueva visita de Tsipras otra vez dio lugar a la especulación de que los griegos pueden estar buscando préstamos rusos. "Si los griegos piden un préstamo, entonces lo tendremos en cuenta, pero aún no lo han pedido," dijo el portavoz de Putin, Dmitry Peskov, a la agencia Associated Press. "Lo haríamos porque son nuestros socios y ésta es una práctica habitual entre los países que son socios."

Por su parte, el ministro de Desarrollo Económico de Rusia, Alexei Ulyukayev, descartó una compra de bonos griegos, pero dijo que las garantías estatales o inversiones –por ejemplo, en el sector de gas natural– podrían ser posibles, según informó la agencia de noticias rusa Interfax.  

En su intervención en foro, Tsipras afirmó que la Unión Europea (UE) debe volver a sus principios de solidaridad y justicia social. "Después de la crisis del 2008, el mundo es diferente. En Europa hemos tenido la ilusión de que somos el centro del mundo, cooperando solo con nuestros vecinos directos. Pero el centro del mundo ha cambiado de lugar, hay nuevas fuerzas a nivel político y económico. Las relaciones internacionales adquieren un carácter multipolar. El así llamado problema griego no es un problema griego, sino un problema europeo y se resume en si la UE será capaz de recuperar su esencia de solidaridad y justicia social".

Por el momento, Grecia ha cerrado su primer gran proyecto energético con Rusia: un memorándum intergubernamental de cooperación para construir en territorio griego la prolongación del gasoducto Turkish Stream, que tendrá un costo de 2,000 millones de euros y será financiado con un crédito ruso a cargo de la compañía de inversión VEB-Capital. Grecia pagará el crédito con su porcentaje de los beneficios del proyecto.

De cara al futuro, ambos países preparan un memorándum para ampliar su cooperación. "Para noviembre, cuando se volverá a reunir nuestra comisión de cooperación, podemos preparar un memorándum que ayude a organizar nuestra ulterior cooperación económica", dijo el jefe del gobierno griego al líder del Kremlin.