La Copa América 2015 tiene un rival de temer: la contaminación. Las autoridades climáticas de Chile explicaron en el invierno austral, las condiciones atmosfericas impiden que los habitantes de varias ciudades del país sudamericano pueda contar con una calidad de aire satisfactoria.
"La calidad del aire va a estar de regular a mala en los próximos días en la zona centro sur del país debido al ingreso de altas presiones y frentes fríos que contribuyen a empeorar las condiciones de ventilación", dijo a la Agencia EFE Luis Gutiérrez, experto de la Dirección Meteorológica de Chile.
Muchos chilenos combaten el frío con calefacción a leña, lo cual es un daño mayor para el medio ambiente.
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La alta polución -durante el último mes- en cuatro de las ochos ciudades que serán sedes del evento deportivo han obligado a las autoridades a implementar medidas como la circulación de vehículos, la prohibición de funcionamiento de un alto números de industrias y el veto total al uso de calefacción a leña. No obstante, estas acciones no han surtido mucho efecto: el smog no se ha disipado en gran medida. A ello se le suma la escasez de lluvias en el centro del país.
Si la situación se agrava podría generarse un estado de "preemergencia ambiental". En ese escenario, las autoridades prohíben la actividad física en los colegios y recomiendan hacer los mismo a los ciudadanos.
Estas condiciones medioambientales afectarían el desempeño de los jugadores de las diferentes selecciones, tal como lo explica el ingeniero ambiental Luis Díaz en un informe difundido por la Universidad de Santiago de Chile (USACH):
"El riesgo de un problema respiratorio provoca pérdida de capacidad aeróbica. Entonces, en el caso de los jugadores, obviamente ello se apreciaría en una menor eficiencia en los partidos. Se debe considerar que cada selección llega con varios días de anticipación. Entonces, durante al menos una semana se están entrenando con altos niveles de contaminación y llegarán con los pulmones complicados a sus compromisos oficiales".
A pesar de este adverso panorama, en Chile no se habla de la suspensión de partidos de la Copa América 2015 (que supondría pérdidas millonarias para tanto para el país anfitrión como para la Commebol). El intendente de Santiago lo tiene claro:
"Si hay algo que no podemos hacer es suspender un partido [la ley chilena entrega a las intendencias la facultad de aplazar o suspender los partidos, fijar el horario o trasladarlos de estadio por razones de seguridad]. Respecto de los partidos de la Copa América no tenemos atribuciones, porque este es un compromiso que asume el país con la Conmebol a nivel latinoamericano".
Entre las ciudades más contaminadas destacan Santiago (donde será la inauguración y final) y Temuco (donde nuestra selección jugará con Brasil y Colombia).
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Ante la imposibilidad de suspender partidos, Díaz remarca que se prohíba la calefacción a base de leña:
"[...] eso mitigaría las malas condiciones ambientales. De lo contrario habrá problemas con la salud de la población, pues los niveles de toxicidad alcanzados en el aire ponen en serio peligro la salud de jugadores e hinchas".
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