La idea es fantástica: un libro infantil que, después de leerse, puede plantarse para que germine un árbol. 

Ese es el concepto desarrollado por la editorial argentina Pequeño Editor con el título Mi papá estuvo en la selva, que narra desde la voz de un niño, llena de ingenuidad y humor, un viaje real a la selva ecuatoriana. Los autores son Anne Decis y Gusti, quienes cedieron los derechos de la creación, pues la publicación no se comercializa.

Algunas páginas del libro pueden verse aquí.

Todos los ejemplares del "libro-árbol" fueron confeccionados con papel reciclado y tintas biodegradables, y llevan incrustadas en las tapas semillas de un árbol nativo en la pulpa de papel. Por eso puede plantarse y ver crecer un pequeño árbol.

"Los libros salen de los árboles. Hoy, un árbol sale de un libro", dice la campaña.

Hojas de papel para producir hojas reales. El libro más verde jamás hecho, literalmente. 

Tras su creación, hace ya dos meses, el libro fue enviado a diferentes autoridades para crear conciencia sobre la importancia de la conservación del medio ambiente. Además, permite a los niños entender de forma amena, mediante la lectura, el proceso del reciclaje y de la preservación del entorno.

Admirable. Y ojalá sirva de ejemplo en el Perú y en otras partes.