La Policía Nacional no descarta que la explosión de una granada esta madrugada frente a la financiera CrediChavín, ubicada en la cuadra 1 de la calle Tarata, en Miraflores, se trate de una extorsión, pese a que el alcalde Jorge Muñoz Wells señalara que no hay registros de este delito en su distrito.
“Como miraflorino me siento muy chocado con este hecho, pero como autoridad local pido mucha calma porque desde que sucedió la Policía Nacional está investigando el caso y nosotros le estamos proporcionando toda la información que tenemos registrada en nuestras cámaras de video vigilancia ubicadas en la avenida Larco y la propia calle Tarata”, declaró el burgomaestre a la agencia Andina.
Muñoz Wells indicó que en Miraflores existe un constante patrullaje en las calles de su jurisdicción, pero que el mismo se redoblará en Tarata y en sus alrededores a fin de evitar futuros actos que causen zozobra entre los vecinos de esta zona, que fue blanco de un atentado de Sendero Luminoso en julio de 1992 que dejó más de 20 muertos, decenas de heridos y cuantiosos daños materiales.
En tanto, la caja CrediChavín se pronunció -a través de un comunicado- sobre el ataque que sufrió sus instalaciones de la cuadra 1 de la calle Tarata catalogándolo como “un acontecimiento fortuito”, ya que señalan que en sus cercanías se ubican otros establecimientos comerciales y que no han sido víctimas de ninguna extorsión.
(andina)
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