El Comercio y La República publican hoy domingo, y destacan en portada, sendas entrevistas al nuevo primer ministro, Pedro Cateriano. Y más allá de su interés político, sus declaraciones resultan interesantes como ejercicio periodístico: aunque en ambos diálogos dice casi lo mismo, el tratamiento y el 'levante' marcan ciertas diferencias.
El Comercio destaca una frase que parece dirigida al gremio empresarial: "Buscaremos estabilidad política para destrabar las inversiones". La República, en cambio, no le rehúye al choque, dejando en claro que Cateriano puede negociar, pero que necesita la buena voluntad de la oposición: "La pelota está en ambos lados de la cancha".
Como para mostrárselo a estudiantes de periodismo.
Pero a lo que íbamos: entre los principales anuncios del Premier figuran, primero, su objetivo de garantizar elecciones limpias, dado que se acerca el último año del gobierno de Ollanta Humala; y segundo: lograr un ambiente de estabilidad que agilice la economía.
Respecto al voto de confianza que algunos congresistas ya le empiezan a negar, Cateriano se mostró cauteloso:
"No quiero ser pesimista, pero de que puede ocurrir (no obtener la confianza), puede ocurrir. Quiero poner lo mejor de mí en estos días para tratar de que no pase (...) Me siento muy abrumado. Estoy como presidente del Consejo de Ministros, tal vez en las circunstancias más complejas de nuestra historia republicana."
El jefe del Gabinete anunció, además, que escuchará opiniones de todos los sectores, pues su diálogo no estará circunscrito a los políticos, sino también a los gremios y los gobiernos regionales.
Consultado por La República, también se refirió al mensaje del expresidente Alan García -con quien mantiene una vieja enemistad política-, que dijo mantener una actitud "serena" frente a la designación del Premier.
"También es mi actitud serena y atenta frente al aprismo y al fujimorismo. Creo que es una de las ocasiones, pocas ocasiones, en que coincido con el presidente García (...) Pero tampoco quiero que interprete que yo cínicamente me estoy quitando una máscara para ponerme otra. Eso no es real. Yo ahora tengo que cumplir un papel, pero a mis ideas y principios no voy a renunciar."
Esa es, más o menos, la posición de Cateriano. Veremos si responde a una moderación real o solo queda en palabras.
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